Trump, el innombrable

Eduardo Lliteras Sentíes
Foto: Ap
La Jornada Maya

Martes 24 de enero, 2017


El reto en el presente año es mantener el 4 por ciento de crecimiento del PIB en Yucatán, dijo el gobernador Rolando Zapata Bello durante la inauguración de las obras en avenida Colón, tras reconocer el ambiente de incertidumbre y de preocupación generado por la llegada de Donald Trump, a quien no mencionó por su nombre, a la presidencia de Estados Unidos.

De hecho, casi ningún político yucateco se atreve a mencionar por su nombre al nuevo presidente estadunidense piel naranja; mucho menos se atreven a cuestionarlo o rechazar sus numerosos insultos a México y los mexicanos, a quienes nos acusa de robar empresas, puestos de trabajo y bienestar.

México, Yucatán, parecieran paralizados, aunque según el argumento de empresarios como Ricardo Dájer Nahum, hay que seguir invirtiendo y los trabajadores, claro está, trabajando, aun cuando el salario cada día valga menos.

Me llamó la atención el argumento, un tanto manido, del gobernador en el sentido de que la forma de repartir la riqueza es a través de los salarios, cuando los de Yucatán están entre los más bajos del país. Conozco demasiada gente sin trabajo, o con ingresos demasiado bajos, como para pensar que con los niveles de ingresos que tenemos en Yucatán vayamos a alcanzar la justicia social, mucho menos si pensamos en los servicios o la posibilidad de recreación, cultura o deporte para todos.

Hablando de cultura, una voz discordante fue la del director del Museo Soumaya, Alfonso Miranda Márquez, quien durante la ceremonia de inauguración de tres extraordinarias exposiciones en el Centro Cultural Olimpo del Ayuntamiento de Mérida dijo que “en tiempos como los que estamos viviendo con Donald Trump en los Estados Unidos, no hablemos de muros; hablemos de puentes, hablemos de crítica política, de crítica social, pero también de compromiso y acción social: de eso trata el arte, de conmovernos y de movernos”.

Las palabras de Alfonso Miranda Márquez fueron como un rayo en cielo sereno. Allí estaba el alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, y otros funcionarios municipales, así como el director del Museo del Estanquillo (que participa con una exposición de Monsiváis y Toledo en el Olimpo), Henoc de Santiago Dulché, quien tuvo palabras más conservadoras. Entre el público había numerosos extranjeros, entre ellos, varios estadunidenses, que deben haber pensado que por fin alguien le responde a su nuevo presidente bocón.

Preguntamos directamente al diputado priísta Jorge Carlos Ramírez Marín sobre Trump, y respondió: “Nuestro principal socio comercial es Estados Unidos, el segundo socio comercial de Estados Unidos se llama México; entonces, ninguno de los dos puede ponerse condiciones tontas. Nos necesitamos recíprocamente, la retórica del presidente Trump, es una retórica que firmaría cualquiera acerca de su propio país: o nosotros, ¿no diríamos “queremos hacer a México grande”, o “consume mexicano y contrata mexicanos”? Pues claro que sí, nada más que hay que ponerlo en el contexto de una relación que comercia prácticamente un millón de dólares cada minuto”.

Sin embargo, Trump volvió a decir, el mismo domingo, que la renegociación del TLCAN va, y con Peña Nieto en Washington, un presidente débil y rechazado por 90 por ciento de los mexicanos, obsecuente y doblegado (con el piel naranja), es de temer que la renegociación sea sólo en beneficio de nuestros vecinos.

Al parecer, las únicas capaces de desafiarlo serán las mujeres, que por millones marcharon en más de 60 países, a favor de la igualdad, pero también por los derechos de los seres humanos, el primer día del gobierno Trump.

La cantante Madonna lo dijo muy bien: “sí he pensado mucho sobre volar por los aires a la Casa Blanca, pero sé que esto no cambiaría nada, no debemos desesperar, nos debemos amar unos a otros o morir, yo escojo el amor … Bienvenidas a la revolución del amor, a la rebelión, a nuestro rechazo a esta era de tiranía: no sólo las mujeres están en peligro, sino también todas las personas marginadas.

Ahora empieza el inicio de nuestra historia, la revolución empieza aquí, la lucha por el derecho para ser libre, para ser quienes somos, para ser iguales, marchemos juntos a través de esta era de oscuridad.”