El periodismo ganso

José Luis Preciado
Foto: Cuartoscuro
La Jornada Maya

Miércoles 6 de mayo, 2020

Solo por esta vez:

[b]El necio[/b]
[i]"Para no hacer de mi ícono pedazos[/i]
[i]Para salvarme entre únicos e impares[/i]
[i]Para cederme un lugar en su parnaso[/i]
[i]Para darme un rinconcito en sus altares[/i]
[i]Me vienen a convidar a arrepentirme[/i]
[i]Me vienen a convidar a que no pierda[/i]
[i]Mi vienen a convidar a indefinirme[/i]
[i]Me vienen a convidar a tanta mierda"[/i]...

Silvio Rodríguez


Un lector de [i]La Jornada Maya[/i] se toma la molestia y el tiempo de analizar mi artículo anterior y sus recomendaciones me hacen reflexionar sobre varias cosas que atañen al oficio de comunicar, más allá de si es periodismo o mero ejercicio de hablar por radio, me pide que lea a los grandes como Leila Guerriero y Martín Caparrós, a quienes por cierto sigo de cerca y considero excepcionales -quizás mi lector diga; no se nota que los leas, sin embargo, un escritor o periodista que leas o sigas no significa más que una opinión adicional que puede enriquecer lo que tu piensas sobre tal o cual tema.

Quizás sean mis formas las que no agradan a uno o varios lectores que piden cifras, datos, estadísticas, referencias bibliográficas y demás paja que no haría más que llenar cuatro planas dignas de una tesis o tratado sobre equis tema, el tiempo del lector es tan finito que abusar de ello nos hace perder paciencia y lectores, para que tanta glorieta y citas si usted cree o no cree en mí; la riqueza de un medio radica en la diversidad del pensamiento, no en alienar ideas en torno a un proyecto de gobierno en turno, muchas veces el lector es cómplice de lo que lee, al final se convierte en fanático del periódico que le dice lo que le gusta.

Si me apresura un poco, le diré que no estoy de acuerdo con López Obrador, porque si alguien conoce al poder por dentro es él; lo criticó, debilitó y bombardeó a instituciones y a todos los que allí trabajan con la peregrina idea de que así destruyendo se sana a una nación, y mire usted el resultado, está allí a la vista, México partido en dos, chairos y fifís, ricos y pobres, todo ello a menos de dos años de ejercicio del poder de un solo hombre.

Si tuviera que acomodar citas del presidente López Obrador en cada columna, usaría a toda La Jornada Maya cada día para ello, las mañaneras se han convertido en lavadero que envía agua sucia y confrontación a todo el país. Un día todos los que no pensamos como él amanecimos en el bando contrario, nadie nos avisó que no estar de acuerdo es estar en contra, simplemente nos dispararon a mansalva desde la Presidencia. Se les cae el país a pedazos y buscan en la antropología política a los responsables. ¿No acaso cuando pides el voto, prometes resolver los problemas del país?, ¿si hay culpables de la bancarrota los enjuicias y sigues caminado a tus proyecto de nación?

Un ejemplo muy claro es Felipe Calderón, si este expresidente fue cómplice de Genaro García Luna y existen pruebas que lo acrediten, díganme qué esperan para proceder?, ¿acaso si lo meten al bote se les acaba la piñata? Por cierto, de los expresidentes nadie menciona a Peña Nieto, que sí es obediente de los silencios y pasa agachado como una tierna y enamorada criatura, Y del bodoque Bartlett que infló los respiradores en tiempos del COVID-19, ¿qué se dijo? Una salida muy priísta. Se investigará, pero antes hay que matar al cartero que trajo la carta, un tal Claudio, "un Equis González", y de paso hay que cepillar al Reforma y así la mata dando.

Yo vivo de preguntar. Ahora resulta que cuestionar es estar en contra.

[b]La del estribo[/b]

Diré incluso que es un honor ser detectado como columnista de odio, en medio de un país desconcertado por la falta de compromiso informativo, considero que estos son tiempos de definición, no de diabéticos dulces que alimentan la muerte lenta de la opinión, saludo, respeto y leo con atención a los columnistas serios que documentan y citan a Ryszard Kapušcinsnky, "los Cínicos no Sirven para Este Oficio", en adelante, sólo si es necesario, procuraré usar citas de Mandela, García Márquez, Octavio Paz u otros grandes que lo dijeron muy bonito.

Recuerdo cómo allí en la tierra del edén, Silvio Rodríguez visitó y bautizó a López Obrador con su canción del [i]Necio[/i], eran tiempos de romance socialista, México siempre ha tenido un corazón de pollo para estos temas, quizás porque ocurren lejos de nosotros, porque la realidad nacional es mucho más compleja que [i]Días y Flores[/i], [i]Me Acosa el Carapálida[/i]… aquí ni son los cincuentas, ni López Obrador es Castro, ni el narco es insurgencia, ni Acapulco es Playa Girón.

[i]Mérida, Yucatán[/i]
[b][email protected][/b]

Edición: Enrique Álvarez