Reporte 8 AM

Pablo A. Cicero Alonzo
Foto: Nabokov cazando mariposas cerca de su casa; Suiza, 1966. Tomada por Phillipe Halsman.
La Jornada Maya

Jueves 29 de septiembre, 2016

Frágiles, en muchas ocasiones etéreas; coloridas, con estridencias inauditas o sobrias combinaciones; intensas instantáneas, surrealistas… Las ideas revolotean a nuestro alrededor; muchas de ellas son como mariposas: bellas y evasivas. Nos sorprenden la mayoría de las veces sin una red. Entonces, las podemos dejar pasar, maravillados con el momento… O ir por ellas.

Cuando no dejaba volar su imaginación, imaginándose nínfulas maliciosas, el novelista ruso Vladimir Nabokov atrapaba mariposas: “He cazado mariposas en diversos climas y con diversos disfraces: como niño con pantalones cortos y gorra de marinero; como larguirucho expatriado cosmopolita con pantalones anchos y boina; como gordo anciano de calzón corto y cabeza descubierta”.

El autor de Lolita nunca aprendió a conducir, pero su esposa, Véra Evseevna Slonim, se encargaba del volante. Mientras vivieron en Europa, cada verano viajaban hacia el Sur, rumbo a los Pirineos. Ahí, armados de redes y paciencia, perseguían, atrapaban y clasificaban mariposas. Una vez que se establecieron en los Estados Unidos, recorrieron casi 200 mil kilómetros en automóvil, entre 1949 y 1959, cazando mariposas.

O cazando ideas, bellísimas ideas. Como Luis von Ahn, cuya cabeza zumba. Es guatemalteco, tiene 37 años y se le considera como uno de los 50 mejores cerebros en la ciencia por la revista Discover; uno de los 10 científicos más brillantes de 2006 por Popular Science, y una de las 50 personas más influyentes en la tecnología por Silicon.com. En 2012, el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, le otorgó el premio de joven destacado en la ciencia e ingeniería.

Von Ahn desarrolló un sistema para identificar a usuarios reales de los falsos, o robots. Este sistema se llama Captcha, siglas de Completely Automated Public Turing Test to Tell Computers and Humans Apart. Y es más que seguro que te hayas topado con él. Consiste en escribir una o dos palabras para comprobar que eres real, ya que sólo los humanos son capaces de comprender y descifrar la secuencia. La belleza de esta idea es que no sólo es funcional, sino que va más allá.

Hay una iniciativa que se llama Proyecto Gutemberg. Millones de libros disponibles de manera gratuita en la Red. Todo el conocimiento generado por el hombre, a un click de distancia. Estas obras, sin embargo, están escaneanas; es decir, aparecen sólo como imágenes. Cada palabra que se captura con Captcha sirve para descifrar esas imágenes y digitalizar así su contenido. Según los cálculos de Von Ahn, cada vez que utilizamos su idea estamos ayudando a digitalizar 100 millones de palabras diarias, es decir, dos millones de libros al año. Sin saberlo, estamos todos juntos escribiendo la historia de la humanidad. Esta sí que es una idea bella.

¿Cuántas genialidades como la de Von Ahn han revoloteado a nuestro alrededor y se han esfumando, dejando sólo la efímera estela de lo que pudo ser? En los últimos años, hemos sido testigos de la aparición de múltiples iniciativas que pretenden ser una red para atrapar y desarrollar esas ideas nonatas. Gobierno, universidades, cámaras empresariales, todos intoxicados por el síndrome de Nabokov. Por ejemplo, el Instituto Yucateco del Emprendedor (Iyem) planea establecer 24 centros en los que se atenderán 24 mil yucatecos al año, para impulsar y desarrollar las ideas que se vinculen con el ecosistema económico de Yucatán. Mariposarios de ideas. El director del Iyem es Francisco Lezama Pacheco.

Otra de las iniciativas que ha destacado en esta sintonía es la del Reto Emprendedor. La tercera edición de esta cacería de ideas ya está en marcha. En el portal retoemprendedor.com se pueden registrar los proyectos participantes; la fecha de cierre de la convocatoria es el 7 de octubre. Se informa que este año se contará con una nueva categoría, además de las otras dos ya existentes, las cuales son Idea de Negocio y Proyecto Emprendido. La tercera categoría es Emprendimiento Social. El principal promotor de este proyecto es Víctor Caballero Durán. Hasta el momento, se señala, Reto Emprendedor ha apoyado a 46 proyectos ganadores, que actualmente ya tienen sus negocios funcionando, y a través de esta iniciativa, que cuenta con el respaldo y acompañamiento de importantes empresarios locales, se han impartido pláticas y talleres de emprendimiento a más de 43 mil jóvenes estudiantes. Resulta interesante el binomio educación-emprendimiento.

Desde hace 10 meses funciona el Centro de Gestión Empresarial de la Cámara Nacional de Comercio, Servicio y Turismo de Mérida (Canaco-Servytur), que también ha tenido excelentes resultados: más de 250 jóvenes han podido atrapar esas evasivas ocurrencias y las han convertido en semillas de algo rentable. El Centro de Gestión Empresarial de la Canaco Mérida ya tiene a su primera empresa desarrollada, incubada al 100 por ciento en ese espacio: “Xcambo Project”, que promueve a pequeños productores de mermelada artesanal con sabores típicos de la región, como papaya con chile xcatic, carambolo con licor de xtabentún y pitahaya con limón.

La lista de cazadores de ideas es larga, y puede —y debe— aumentar. Por primera vez, el vuelo de esas mariposas, otrora caótico, hoy tiene rumbo. Al fin nos dimos cuenta que es posible domar las genialidades que de vez en cuando —muy de vez en cuando, en mi caso— se posan en ese cerebro que nos sorprende con su lucidez…

[b]Mérida, Yucatán
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