Reporte 8 am

Pablo A. Cicero Alonzo
Foto:
La Jornada Maya

8 de marzo, 2016

[i]Guía básica de cultivo de mariguana con leds.[/i] Este manual lo puedes encontrar fácilmente en la Internet, y ofrece un recuento detallado de consejos para que la planta crezca. Se señala, por ejemplo, que “la cannabis es una devoradora de luz y la calidad de ésta influye directamente en los resultados de una forma rotunda”. Se sugiere utilizar varios espectros de color, cada uno con una función específica; por ejemplo, “la luz roja ayuda a ramificar”. No se requiere ser un botánico —ni un criminal— para sembrar y cosechar la planta; ahora, con la información y las facilidades que otorga la biblioteca de Alejandría que es la red de redes, cualquiera puede hacerlo.

Entre ellos vecinos de Mérida, que transformaron la vivienda ubicada en la calle 47, entre 50B y 50C del fraccionamiento Pensiones III Etapa, en un sembradío indoor de mariguana. Por fuera, la casa parece normal, pero en el interior… Obviamente, focos leds, paredes de aluminio, humidificadores, extractores de aire; alta tecnología que redundaba en frondosas, verdes plantas, cuyas hojas, una vez procesadas, se vendían a cien pesos el gramo. Lo anterior, según la información dada a conocer el fin de semana, que fue cuando se desmanteló este emprendimiento ilegal.

Esta noticia no sólo se leyó en medios locales, sino que trascendió el “muro de Trump” de los yucatecos. El solarium fue noticia en todo México, por sus innovadoras características. De nuevo, Yucatán fue protagonista en un tema relacionado con la cannabbis, como sucedió hace meses, cuando se divulgó que una de las mariguanas sintéticas más populares era la llamada “Yucatán Fire”, el fuego de Yucatán.

Para el tipo de instalaciones en donde se cultivaba droga en Pensiones, en la misma Internet se responden preguntas cómo ¿qué sustrato utilizar?, ¿qué plantas cultivar?, ¿cómo utilizar los abonos?, ¿cómo regar según tamaño de planta y maceta?, ¿qué sistema de cultivo es el más conveniente? y un largo etcétera más. Todo lo que quisiste saber sobre la siembra ilegal de mariguana y nunca te atreviste a preguntar. Los insumos igual se pueden adquirir en páginas especializadas electrónicas; un gran Amazon de mota, en donde se adquieren desde fertilizantes hasta rociadores. Para las semillas es un poco más complicado, pero, de seguro, tampoco es un gran problema adquirirlas.

En este escenario, me pregunto ¿qué se requiere para que Walter White se transforme en Heisenberg? Un profesor de química, al que le acaban de diagnosticar cáncer de pulmón, decide pasarse al lado oscuro. Su mísera vida, que con la metástasis parece escurrírsele de las manos, se reduce a deudas. Ante la inminente muerte, y con sus conocimientos como único legado, monta un laboratorio y comienza a cocinar metanfetaminas. La reacción es explosiva: Como el Dr. Jekyll, el míster Hyde de Walter White, Heisenberg, es su antítesis violenta y criminal.

Este es el argumento inicial de la serie de TeVe Breaking Bad, que ya se ha convertido en una producción de culto. El argumento, exprimido de los cerebros más imaginativos de la industria del entretenimiento de Estados Unidos, es una alegoría del peligroso balanceo de una persona normal hacia la maldad; funambulista entre lo aceptado y lo prohibido, lo peligroso, lo ilegal… ¿Qué se requiere para que un vecino de Pensiones se convierta en un narcotraficante? Como ya vimos, sólo las ganas, ya que para montar un laboratorio en casa sólo se necesita descargar los manuales de Internet.

El gobierno está perdiendo terreno frente al narcotráfico. Y no sólo en el campo, en las batallas que se libran en todo el territorio nacional, sino también en la percepción pública, mucho más laxa y permisiva con el uso de estupefacientes. Llama la atención el caso de la mariguana, cuya aceptación es cada vez mayor a nivel mundial. De los cafés holandeses a Colorado; de la despenalización en Uruguay a los veredictos de nuestra Suprema Corte. En grandes sectores de la población, la mariguana ya no es vista como una amenaza.

Sin embargo, y aunque muchos en el fuero interno admiren el espíritu emprendendor de los Heisenberg de Pensiones, el cultivo y venta de la droga —de esa droga— continúa estando castigada. Para nuestra ley y autoridades, los botánicos de Mérida son delincuentes. Punto. ¿Y para el resto de la sociedad? El debate, desde hace tiempo, está puesto sobre la mesa. Sin embargo, las autoridades aún no se deciden a encararlo, y mientras más se demoren, más serán las personas que comiencen a ver el consumo de mariguana como algo que debería ser permitido. Hay argumentos a favor y en contra; apóstoles de ambas posturas sobre la despenalización; hay que sentarlos, cuanto antes, a discutir sobre el tema.

Mientras tanto, más laboratorios clandestinos como el de Pensiones continuarán apareciendo, fortaleciendo a esa industria ilegal, que conllevan, intrínsecamente, otros delitos; una especie de tiburón invadido de rémoras que nada en un turbio océano.