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La Jornada Maya

Lunes 10 de diciembre, 2018

El abajo firmante, vocero estatal del Movimiento Antorchista de Campeche, a nombre del Comité Estatal de nuestra organización, me dirijo a usted de la manera más respetuosa para saludarle, y solicitarle atentamente nos otorgue el derecho de réplica y nos conceda que se publique en su medio impreso y en su portal electrónico la siguiente aclaración, acerca de una nota aparecida el día 4 de diciembre en esos mismos espacios (edición impresa y electrónica), en la que se dicen cosas falsas que atentan no solamente contra nuestro honor sino contra nuestra misma seguridad moral y física, por lo que es necesario que se nos permita responder y que se publique en espacios no menos públicos que los que se le concedió a la mencionada nota.

La nota inicia afirmando que “Vecinos de la colonia Antorcha Campesina, en la comunidad de Puerto Rico, en la península de Atasta, denunciaron que han sido objeto de una estafa por parte de los dirigentes de la organización del mismo nombre, en la compra venta de al menos 326 predios”, pero ya en esta parte encontramos 4 mentiras flagrantes, las cuales ya no sabemos si se deben atribuir a las personas mencionadas en el cuerpo de la nota, al redactor de la misma o a la empresa editorial. Son las siguientes

Las afirmaciones que hacen las “denunciantes” no son una denuncia, pues esta debiera presentarse ante las instancias correspondientes. No hacerlo y sólo presentar afirmaciones sin sustento ante los medios de comunicación tiene otro nombre, se llama calumnia. La calumnia es un delito, definido como la imputación falsa a otro de un hecho que la Ley tipifique como delito, se castiga penalmente en Campeche, y las penas van de los tres meses a los seis años de prisión, y de tres hasta mil días de salario mínimo como multa.

En la regularización de la colonia La Antorcha no hay ninguna estafa. Para poder imputar ese delito, se debiera presentar pruebas, cosa que no sucede. Aunque la carga de la prueba no corresponde a los acusados, sino a los acusadores, afirmamos que podemos demostrar la limpieza de toda la evolución de la colonia “La Antorcha” ante cualquier autoridad que nos lo requiera.

No es una simple compraventa. El Movimiento Antorchista organizó este grupo de solicitantes de terrenos para vivienda y realiza diferentes trámites para regularizar la posesión de los lotes, de manera que ni se infrinja la Ley ni resulte muy costoso a los integrantes, todos ellos (con algunas raras e indeseadas excepciones) son jefes de familias humildes y trabajadoras, imposibilitados por ello para realizar una “compraventa” de un terreno, como se hace en el mercado de bienes inmuebles.

No se trata de 326 predios, sino de 323, cuyos poseedores, todos, están de acuerdo y perfecta-mente informados de todos los trámites que se realizan, con excepción tal vez de la señora Violeta Franco Santos, cuatro supuestos “familiares” de ella y un grupo minoritario que le sigue, personas que no habitan la colonia pese a que ya se les dio la posesión de su lote, pero que lo tienen abandonado pues viven en otras partes. Es una mentira inadmisible que se quiera presentar a las “inconformes” como si representaran a todos los habitantes de la colonia.

Aunque más adelante la nota atribuye tales afirmaciones a Violeta (“Sánchez” ) Franco Santos, debemos dejar claro que todas estas afirmaciones las hace públicas el medio sin consultar primero a los señalados dirigentes antorchistas en la colonia, ni a la directiva en el estado, ni a los habitantes de la colonia “La Antorcha”, y cotejar nuestra versión, omisión que pone en riesgo no sólo nuestro honor y prestigio, sino la seguridad e integridad física de cientos de habitantes de la colonia, la de los dirigentes y activistas de Antorcha en general.

La colonia tiene en efecto 7 años de haberse fundado, aunque el grupo de solicitantes ha trabajado desde antes para poder llegar a la etapa de ocupación de los predios. Cada titular sabe que en efecto los predios fueron adquiridos por nuestra organización, como un esfuerzo colectivo del mismo grupo de solicitantes, con la cooperación y el apoyo de todos los titulares, para después realizar el trámite de regularización de cada uno, mediante los mecanismos que resulten más económicos para nuestros compañeros y con la intervención de las autoridades correspondientes, sean municipales o estatales.

Actualmente ya contamos con la escritura pública no 096 2018 en la que se da fe de la compraventa de una parte de la colonia y la otra se encuentra en trámite ante el notario público no. 12 de esta ciudad del Carmen, trámite que una vez concluido permitirá avanzar en la regularización a cada titular, para poder extender la escritura de cada predio.

En el proceso, ha sido necesario realizar diligencias, hacer antesalas ante diferentes dependencias, realizar gestiones para introducir servicios, realizar marchas y mítines, faenas comunitarias, etc., todo ello para que la colonia tenga los servicios necesarios tales como luz eléctrica, agua, pavimentación, escuela, etc., y todos los habitantes han participado con ánimo y decisión. Saben que todo es por el progreso de su colonia, para poder terminar los trámites y que cada uno tenga la escritura de su terreno.

Mientras, es el reglamento de funcionamiento del grupo de solicitantes y su observación por cada solicitante, así como la posesión que se le dio, con base en ese mismo reglamento, lo que garantiza a cada titular, incluidos los que aún no han terminado de aportar su cooperación, que es, en efecto, de 20 mil pesos por un lote de 10 x 20, la seguridad de que el trámite se realizará con todo éxito. Las aportaciones de los habitantes no se realizan en efectivo de mano a mano, sino depositando a una cuenta mancomunada, en abonos según sea la posibilidad de cada familia, lo que les permite aportar finalmente lo de su lote sin importar que tan pobres sean. Todos los solicitantes de terreno para vivienda estaban enterados, sabidos y de acuerdo con este proceso.

Ningún habitantes de La Antorcha tiene entonces ninguna duda acerca de cuáles son los pasos a seguir, ni siente ninguna falta de certeza acerca de su lote, su posesión ni su propiedad, ni siquiera Violeta.

Entonces, ¿qué hay en realidad detrás de esta acusación sin fundamentos? ¿Existen algunos otros intereses inconfesables o gentes ajenas al grupo dando protección y asesoría a Violeta? Sólo ella lo sabe. Sin embargo, podemos y debemos presentar algunos hechos que permitirán entender un poco la autenticidad de la “denuncia” de Violeta Franco.

El grupo de solicitantes lo integran familias humildes, obreros, campesinos, pescadores, pequeños comer-ciantes, cuyos ingresos no les permiten adquirir por simple compraventa un terreno para construir su hogar. El objetivo del grupo es hacer posible que estas familias humildes adquieran terreno propio y tengan su hogar, que dejen de pagar renta o vivir arrimados.

Pero al parecer hay quienes se han aprovechado de este grupo no porque realmente necesiten un terreno para vivir, sino para hacer negocio. Así, Violeta Franco Santos se anotó en la lista de solicitantes hace apenas cerca de 4 años y anotó a otras 4 personas, supuestos parientes. En todo el proceso, que incluye los 4 años de posesión de los terrenos, solo hemos conocido a Violeta y algunas veces a un su yerno de nombre Otoniel Arévalo Hernández, mientras que los otros titulares nunca se han aparecido. Cuando se les ha requerido, Violeta ha presentado escusas para su inasistencia, ¡durante cuatro años!, y finalmente, intentó presionar a la directiva para que los cinco lotes salieran a nombre de ella.

Que esto es así lo sabemos todos los habitantes de la colonia, y la directiva antorchista. Sabemos también, aunque un poco tarde desgraciadamente, que Violeta no es la primera vez que intenta aprovecharse de la gente que realmente necesita terreno y que tiene fama en Puerto Rico de haber, ella sí, haber hecho negocio con la “compraventa de lotes”.

¿Qué otros intereses pueden haber en este asunto?, ¿acaso pretende engañar a las autoridades municipales para que pudiera quedarse al frente del trámite de regularización y entonces poder aprovecharse para hacer algún tipo de negocio?, ¿o solamente le urgen las escrituras para poderlos vender, seguramente a un precio mucho mayor a esos 20 mil? Lo desconocemos, pero afirmamos que en la colonia La Antorcha NO hay “falta de certeza” acerca de su lote, su posesión ni su propiedad; que no es cierto que se trate solamente de una compraventa, sino de todo un proceso que requiere tiempo y lealtad de los integrantes; que no es cierto que haya estafas de ningún tipo en el manejo de la colonia, ni es cierto que la preocupación de Violeta sea la que dice.

Por todo ello, queda también evidenciada la falta de autenticidad y de honestidad de Violeta. Ella es libre de hacer lo que quiera, pero debe respetar las instancias legítimas del grupo y de la colonia, debe respetar a quienes habremos de regularizar a todos los titulares, y debe respetar a los demás habitantes, siquiera por simple educación, debe dejar de calumniar a la colonia y a nuestra organización, a la lucha de todos los antorchistas por el derecho a una vivienda digna, propia y al alcance de sus posibilidades. o bien puede dejar que el grupo de solicitantes siga trabajando en común acuerdo, tomar su dinero e ir a comprar, ahora sí, un terreno en algún lugar en donde no le pidan que haga todo lo que hacemos los de La Antorcha.

Atentamente
"Unión, fraternidad y lucha"
Movimiento Antorchista de Campeche
Comite Estatal

Javier Martínez Jaramillo
Vocero Estatal
Oficina de Comunicación Social
Calle Zedillo, mz. 2, lt. 6, Colonia Ernesto Zedillo,
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Tel.: 981 146 15 80
Cel.: 981 207 17 25
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