Texto y foto: Infoqroo
La Jornada Maya
Kantunilkín, Quintana Roo
Viernes 10 de mayo, 2019
A los 61 años, la señora Margarita Canul Baas descubrió que tiene un don, que a lo largo de 25 años le ha permitido ayudar a muchas mujeres de Cancún, Playa del Carmen y de las comunidades del municipio a llevar sus embarazos a feliz término: “sobadora de vientres”.
Hoy, con 86 años, recuerda que las primeras mujeres a las que sobó el vientre fueron sus hijas, luego de que el doctor les dijo que el bebé estaba en mala posición. Con sus manos corrigió el problema y sus nietos nacieron sin complicación.
Hoy, doña Margarita recibe en su casa a mujeres embarazadas que llegan desde diversos puntos del Estado y del buscando su ayuda, una “tallada” que les ayude a corregir la mala posición de sus bebés.
“Yo no soy partera. Sólo aprendí a sobar a las mujeres, que ahora me buscan cuando la posición del bebé no es la correcta y que por eso pueden tener complicaciones al momento de nacer. Afortunadamente, luego de que las atiendo, muchas vienen y me dicen que sus niños nacieron sin complicaciones”, explica.
Canul Baas dijo que lleva 25 años sobando a las mujeres embarazadas “empecé con mis hijas cuando el doctor les dijo que está mal la posición de su bebe, sin imaginar que ahora me busquen en mi casa. No cobro por esto, sólo recibo lo que me dejan voluntariamente”.
Aunque sus hijas trataron de animarla para que atendiera partos, dijo que no lo hizo porque “siento que eso es otro nivel. No tengo los conocimientos o la preparación, sólo puedo sobar y componer la posición del bebé cuando está atravesado en el vientre de la mamá para que tenga un parto sin complicaciones”.
Los locales tomaron ventaja sobre los astados en el primer tiempo tras una expulsión
La Jornada Maya
Prevén precipitaciones fuertes en Yucatán y Quintana Roo
La Jornada
La AMASFAC visitará 12 escuelas con la finalidad de instruir a más de mil 200 infantes
Ana Ramírez
El programa de actividades inicará el 31 de octubre y contará con más de 30 actividades gratuitas
La Jornada Maya