Texto y foto: Roger Mora
La Jornada Maya

Tulum, Quintana Roo
Lunes 31 de diciembre, 2018

Los famosos “Jaladores” así como vendedores ambulantes continúan presentando un serio problema para los vendedores legalmente establecidos y que pagan impuestos de manera constante, en la que piden a las autoridades municipales atender este problema sobre todo en los alrededores de la zona arqueológica y Parque Nacional Tulum.

Con la solicitud de orden en la actividad comercial y turística del acceso a la zona arqueológica de Tulum, el administrador de la plaza Centro Artesanal Tulum, Pedro Canul Méndez, mediante aplicación de reglamentos de Comercio en Vía Pública y Fiscalización.

La actividad de jaladores en los primeros cien metros de ese camino que recorre el turista lesionan la economía de los 71 comerciantes ubicados al interior del parador comercial donde cayó el movimiento.

Esta caída obedece a que los famosos jaladores establecidos cerca de la carretera federal desvían el recorrido del turista hacia los sitios que son de su conveniencia, situación que ya fue planteada por los comerciantes a las nuevas autoridades municipales, principalmente de la Dirección de Turismo, con la finalidad de que actúen de inmediato para no ocasionar más daño a los negocios formales.

Recientemente tuvieron la visita de algunos directores, quienes conocieron de cerca la situación que prevalece y quedó el compromiso de llevar a cabo una regularización de la actividad tanto comercial como de oferta de servicios turísticos, y contar con una representación en ese acceso donde la informalidad y los atropellos, y el engaño habían sido reportados ante la autoridad municipal para que se actúe.

El reglamento de Comercio en Vía Pública establece que se deberá permanecer dentro de los stand para ejercer el comercio y no interactuar en la calle con el interesado en la contratación de algún servicio, indicó, hay por lo menos 50 enganchadores y cuatro módulos autorizados para la actividad.

El personal de la plaza que vende en los módulos, tiene como cláusula principal no salir del espacio asignado y la administración del centro artesanal cuenta con cuatro módulos y no ocupan la calle para lo que tienen encomendado llevar a cabo, agregó Canul Méndez.

En la pasada administración, el personal de Fiscalización y de Comercio en Vía Pública dejó de hacer rondines, y entonces los enganchadores o jaladores incrementaron hasta la cantidad de 50 que contratan en la calle los servicios que ofrecen, sean tour acuáticos, o bien espacios en estacionamientos creando una competencia que lesiona a terceros, agregó.


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