Texto y fotos: Héctor Cobá
La Jornada Maya
Mérida, Yucatán
Jueves 9 de noviembre, 2017
El fotógrafo y galerista mexicano Pepe Soho se desligó de las instituciones culturales oficiales y se considera un cazador de momentos, su trabajo en la fotografía es artesanal, ya que puede tardarse meses para una toma que lo convenza, es toda una aventura lograr sus fotos de paisaje.
Aprovecha que en el mercado de que hay pocos fotógrafos paisajistas, “trabajo que sí vendo en las cinco galerías que tengo (incluida la de la Quinta Avenida de Playa del Carmen), debido a que soy muy exigente conmigo mismo, con mi trabajo; siempre trato de superar mi trabajo o fotografía anterior; contrario a lo que pensé, a partir de que empecé a exponer piezas monumentales con base en la naturaleza, escuché comentarios positivos hacia mi labor, lo me hizo seguir adelante”, señaló.
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“Como empresario cultural me desligo de las instituciones oficiales de cultura, ya que no tengo que pelearme con nadie, ni tocar puertas para exponer mi obra; aunque debe haber mucho artista bueno que no tiene esta oportunidad, esperando su turno para exponer, pero hay que trabajar para lograrlo y dar a conocer la obra de cada uno.
Incluso pretendo fomentar en los niños el afecto por la fotografía e inculcarles el despertar de la conciencia al respeto al medio ambiente, como me sucedió a mí, ya que los infantes que visitan y ven mis fotos en la galería, tiene su primer contacto con el arte, y explican lo que ven, hecho que me alimenta como profesional de la lente”, subrayó el ganador de la medalla de oro en el Mundial de Fotografía 2017, con la imagen [i]Believe[/i], que se llevó a cabo en la ciudad de Yokohama, Japón; en el cual participaron artistas de más de 26 países de todo el mundo.
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