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Ana Ramírez
04/11/2025 | Cancún, QRoo
Con el objetivo de contribuir a una mayor sustentabilidad en Isla Holbox, ciudadanía, empresas y asociaciones se han sumado al proyecto Holbox Circular, con el que se promueve la separación de los residuos y el reciclaje, para contribuir a una reducción de los desechos.
Lo que comenzó como una iniciativa vecinal para mejorar la limpieza de la isla, se ha convertido en un movimiento comunitario que une a residentes, negocios, instituciones e incluso visitantes en torno a un objetivo común, que es preservar el paraíso natural.
A través de la Asociación Fuerza Viva de Holbox, creada por residentes y empresarios locales, la comunidad lleva casi dos años organizando "barridos" mensuales, jornadas de limpieza que abarca toda la isla en un solo día, gracias al trabajo coordinado de entre 100 y 200 voluntarios cada jornada y que tuvo un mejor cauce cuando llegó Holbox circular con un manejo correcto del pet.
"Dividimos la isla en 12 áreas, cada una con un responsable. En un mismo día, durante tres horas, logramos limpiar toda la isla. A veces somos más de 200 personas, otras un poco menos, pero la voluntad siempre está”, especificó Cinzia Properzi, fundadora del barrido masivo e integrante de Fuerza Viva Holbox.
El movimiento ha recibido apoyo de distintas organizaciones, entre ellas Holbox Circular de Bepensa y la Fundación Tláloc, que impulsaron la separación de los residuos en reciclables y no reciclables antes de ser trasladados fuera de la isla.
Además, el ayuntamiento de Lázaro Cárdenas ha destinado parte de los impuestos locales a un grupo de saneamiento ambiental que refuerza las labores de limpieza y mantenimiento de las zonas públicas.
En los barridos participan jóvenes, adultos, empresarios, hoteleros e incluso primaria y secundaria, lo que ha permitido fortalecer la educación ambiental desde temprana edad.
“Sensibilizar a los niños es clave, porque ellos transmiten esa conciencia a sus padres y son el futuro de la isla”, comentó.
Incluso turistas nacionales y extranjeros se han unido espontáneamente a las labores de limpieza, motivados por el ejemplo de los residentes y las invitaciones que se difunden en redes sociales y en la página de la alcaldía.
Por su parte, Yadira Martínez Correa, originaria de Holbox y dueña de un pequeño hostal, explicó que su negocio separa residuos, reutiliza envases de vidrio y promueve entre los huéspedes una cultura ambiental responsable, algo que cada vez más centros de hospedaje están realizando, lo que va sumando a un mayor cuidado de la isla.
Se realiza una separación de plásticos, latas, vidrio y cartón principalmente, pero la idea es que cada vez más empresas lleguen a Holbox a llevarse los diferentes tipos de residuos, para seguir ampliando la red.
El impacto es visible, afirmó, los días de limpieza masiva, las calles lucen libres de basura y los comercios se muestran más comprometidos con mantener la buena imagen del destino turístico, pero además en cada edición van recolectando menos basura, lo que confirma que está creciendo la conciencia ambiental, aunque aún queda camino por recorrer. Hay zonas donde la participación es menor y persiste el reto de reducir los residuos de un solo uso, especialmente el plástico.
Con casi dos años de trabajo constante, el barrido de Holbox se ha consolidado como un ejemplo de autogestión y responsabilidad ambiental en el Caribe Mexicano.
Edición: Ana Ordaz