Texto y foto: Manuel Sánchez
La Jornada Maya
Cancún, Quintana Roo
Sábado 10 de noviembre, 2018
El Cabildo del Ayuntamiento de Benito Juárez encabezado por la presidenta municipal, Mara Lezama, decidió posponer, hasta que no haya un verdadero análisis junto con el sector hotelero, la aprobación del impuesto de saneamiento ambiental que sería cargado directamente a los turistas.
La propuesta contemplaba que por cada noche que un visitante pernocte en cualquiera de los centros de hospedaje de la ciudad se realizará el pago de 20 pesos, los cuales se trasladarían a un fideicomiso que sería utilizado para el saneamiento de este destino turístico.
La presidenta municipal, Mara Lezama, decidió eliminar el punto de acuerdo de la Sesión Extraordinaria de Cabildo hasta que no haya un análisis.
Los regidores coincidieron y avalaron la sensibilidad política de la autoridad municipal de no avalar, por ahora, ese cobro.
José Luis Acosta, regidor del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y principal opositor de la propuesta había señalado que ese impuesto significaba dar la espalda a los turistas.
“No se vale qué si durante años hemos defendido el turismo, hoy le demos la espalda con este nuevo cobro que pretende ser aprobado, el cual no solamente afectará a los turistas
extranjeros que pagan con dólares sino a nuestros familiares y amigos que hacen un esfuerzo por venir a visitarnos”, indicó.
Detalló que diariamente se recaudarían por lo menos 300 mil pesos, sin embargo no estaba claro la forma de utilizarse, ni tampoco quien lo administraría.
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