Paul Antoine Matos
La Jornada Maya
Mérida, Yucatán
Lunes 6 de noviembre, 2017
La Capilla Sixtina en Mérida se trata de un encuentro entre Dios y el Hombre a través del artista Miguel Ángel que la pintó hace 500 años en la Ciudad del Vaticano. Para Roberto Romano, secretario general de Museo Vaticano, ese encuentro tiene que ver con la vida, en la que las personas que entran alzan su mirada al cielo y encuentran sentido a su propia vida.
La réplica de la Capilla Sixtina, en la avenida Mérida 2000, al lado del Jardín Bepensa, hasta el siete de diciembre, se inauguró ayer. En sus 40 metros de largo, 20 de alto y 14.5 de ancho, dos millones 700 mil microfotografías replican lo logrado por Miguel Ángel Il Divino en la original de Roma: [i]El Juicio Final[/i], el encuentro entre Dios y el Hombre a través de sus índices, imágenes bíblicas y de los apóstoles. Un Cristo unido a la cruz en una única figura tallada en madera por Agustín Parra, el piso de baldosas replicado por un meridano, hasta los uniformes de los guardias suizos que custodian la entrada. Cada detalle es un espejo a más de 10 mil kilómetros del original.
“En México la fe es parte integral del pueblo y la nación”, expresó Roberto Romano. Señaló que la réplica y la original están llenas de figuras, colores y geometrías que son también parte de uno mismo.
El Papa Julio II le encargó a Miguel Ángel la pintura en 1508. Años después, le pedirían continuar con [i]El Juicio Final[/i], pero el Papa Clemente VII no pudo ver concluida la obra, ya que murió tras ingerir un hongo envenenado. La terminó en 1541 para Pablo III.
El alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, dijo que la replica va acorde con las políticas públicas de la ciudad en materia de cultura y permite posicionar a la ciudad como destino de turismo cultural.
La entidad con la lista nominal más grande es el Estado de México
La Jornada
Especial: Fauna Nuestra
Ana Ramírez
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