Granjas porcícolas en Yucatán, sin consulta indígena: Seduma

Paul Antoine Matos
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Viernes 27 de octubre, 2017

Ante su inexistencia a nivel estatal, es necesario establecer el marco legal para definir qué proyectos deben ser sometidos a la consulta pública e indígena, manifestó Eduardo Batllori Sampedro, titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma).

Luego de que homunenses entregaran el miércoles en Palacio de Gobierno los resultados de la autoconsulta indígena por la granja porcícola que se construye en el municipio, el funcionario manifestó que el gobierno no ha determinado cuáles son los proyectos que deben ser procesados para consulta, algo que podría ser propuesto por el Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (Indemaya) o la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI).

“¿Qué proyectos deben tener consulta indígena? ¿Los de cenotes fueron sometidos? Hay 80 granjas porcícolas en la reserva geohidrológica y 400 en Yucatán, ninguna ha sido sometida a consulta indígena”.

“¿Qué otros procesos deben ser sometidos, que impliquen procesos de despojo? No hay un reglamento o ley que diga que tales proyectos y magnitudes deban tener la consulta”.

Afirmó que sí se necesita definir los proyectos para la consulta porque no es clara la información.

Al ser cuestionado sobre qué tanto una consulta indígena debe realizarse cuando el terreno fue adquirido a un privado y no un ejido, señaló que “no hay claridad, un privado con su terreno en cualquier municipio tiene que hacer su consulta por el proyecto, también en los terrenos ejidales hay granjas porcícolas, ¿tienen que hacer consulta pública? Eso no queda claro”.

Reconoció que “el ciudadano común puede hacer todo aquello que la ley no le prohíba, el funcionario público tiene que hacer exclusivamente lo que la ley le dice”.

Expresó que la autoconsulta indígena de la asociación civil local Ka´anan Ts´onot aún no se le ha presentado, pero espera que pronto se haga. Consideró que no se guardaron los procedimientos para hacer la consulta: solicitud, acuerdos previos, elección de representantes en las mesas de negociación, mesas informativas y deliberativas, la propia consulta y los acuerdos finales”. Pero no se cubrieron todos los pasos, mencionó.

Al momento de realizar la consulta, Ka´anan Ts´onot invitó al presidente municipal de Homún, copia que llegó a la Seduma, pero no a se invitó a la Seduma, ni a él de manera directa, reconoció.

Enfatizó en que “las puertas de la Seduma siempre han estado abiertas. El cinco de julio nos reunimos con los cenoteros, les expliqué lo que implicaba el proyecto y les hice la orientación para ir con el presidente municipal y solicitar la revocación de la licencia”.

Declaró que la Seduma publicó el manifiesto de impacto ambiental para que durante los 10 días hábiles pudieran expresar a su conveniencia o derecho lo que dispongan, por lo que de ahí debió surgir la consulta.

Indicó que la actividad porcícola del estado está condicionada por las leyes, no se trata de sólo poner el biodigestor, se pide también que se ponga una planta de tratamiento de agua que asegure el cumplimiento de las normas 001, 002 y 004, para que el agua en plantaciones sea reutilizada.

[b]Reserva geohidrológica[/b]

Reconoció que la reserva geohidrológica del Anillo de Cenotes no cuenta con un programa de manejo en el que se definan las actividades a tratar. Pero desde el 2013 se realizó una firma de intención con los alcaldes de los 13 municipios de la reserva, por lo que actualmente se trabaja con los alcaldes para generar el acuerdo, en el que podrán establecer qué actividades quieren o no, y pronto se realizará una junta con los municipios.