Tapanco, espacio escénico con conciencia social

Juan Manuel Contreras
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Viernes 3 de marzo, 2017

“Un espacio para todos” es el slogan que revela una ideología, desde la cual opera el Centro Cultural Tapanco; próximo a cumplir cinco años de existencia. Se trata de un proyecto independiente, enfocado al desarrollo de las artes escénicas, la recreación y el esparcimiento, cuyo objetivo es albergar cualquier posibilidad de manifestación artística, social y política, sin restricciones de ningún tipo.

En entrevista con La Jornada Maya, parte de los integrantes del colectivo, platican sobre su surgimiento y los retos que han enfrentado, así como de los eventos con los que celebrarán su aniversario, convertidos ya en un punto de referencia para las artes escénicas, en la capital yucateca.

“Fue una conjunción de voluntades entre amigos y colegas, que buscábamos un espacio para montar una cafetería-bar”, comenta Bryant Caballero, director general del centro cultural; quien considera que tener un espacio propio, es un deseo muy recurrente entre la gente que se dedica a las artes escénicas, “ese sueño se concretó con el apoyo de seis compañeros y encontramos esta casa, la restauramos y comenzamos a operar un 3 de marzo”, recuerda.

Tapanco es un espacio propicio para la formación y el diálogo, y de encuentro y reflexión entre artistas. “Creo que lo que hemos construido se basa en el compromiso ético y laboral con el quehacer escénico”, añade Bryant, en referencia a las obras acogidas en este espacio.

“Uno de los grandes retos son los recursos humanos para mantener activo un espacio tan grande como Tapanco”, comenta María José Pool, programadora de cartelera, quien recuerda que en los inicios, una de las dificultades era encontrar artistas para participar del proyecto, “teníamos un día de funciones a la semana, ahora ellos se acercan a nosotros”, afirma.

El centro cultural ha evolucionado en dos sentidos; a nivel de infraestructura se ha adecuado constantemente, “Esta era una casa abandonada; pero el cambio más importante es de tipo político; es decir, se ha dotado de una conciencia social, teníamos la idea de pensar el teatro más allá del placer estético”, señala su director.

“La mayor satisfacción es permanezcamos, eso lo dice todo; pues ha sido un diario batallar. Es una tarea que implica mucho compromiso”.

Tapanco celebrará su quinto aniversario en el Centro Cultural Olimpo con la puesta en escena de la obra Don Quijote, Historias Andantes: Teatro para una sola actriz y un mundo de objetos, trabajo de la agrupación Silka Teatro Andante, en conjunto con La Rendija, con la dirección de Raquel Araujo y la actuación de Silvia Káter. El costo será de 120 pesos y se puede reservar a través del correo o redes sociales de Tapanco. Posterior a la obra, se presentará la banda Swinga Tu Madre en el bar “La Casa de Ágata” (a un costado de Tapanco), una fusión de música balcánica y contemporánea.