Más de 400 perros yucatecos han sido adoptados en Canadá

Desde hace siete años, la asociación Evolución Animal colabora con otras de Canadá para enviar perros yucatecos a ese país y procurarles un hogar digno. A la fecha, más de 400 canes se han beneficiado de este programa que su impulsora, Silvia Cortés Castillo, considera exitoso.

Se necesitan personas responsables que puedan recibir a estos animales, hacerse cargo de su cuidado y posterior seguimiento de su correcta y segura colocación en su nuevo hogar. Para lo anterior, Evolución Animal tiene convenios con tres asociaciones de Canadá.

El proceso inicia con los preparativos de estos animalitos con dos o tres meses de anticipación. Primero se les selecciona con base en el tiempo que hayan permanecido en el santuario, y algunas de sus características físicas.

“Con esto me refiero a las características que sabemos que son menos apreciadas en nuestro estado. La mayoría de los animalitos negros, color canela y de piel atigrada no son solicitados en adopción, se van rezagando y pueden pasar muchos años con nosotros”, indicó la activista.

También, añadió Cortés Castillo, la selección responde a características físicas que llaman mucho la atención en Canadá, como, por ejemplo, el pelo de alambre.

“La sociabilidad del perrito es igual un factor muy importante, que sea accesible con las personas, así como el tiempo que ha pasado por nosotros, pues no están disfrutando el objetivo de nuestro santuario que es que sean adoptados después que hayan sido rehabilitados”.

Al ser rehabilitados en el santuario, prosiguió, significa que se les ha estado manteniendo por años. Esto, aclaró, no es que sea algo pesado en un término despectivo; sino significa que tendrán que atender por un período largo.

“Todo esto incrementa los costos. No es que nos pese en cuanto a esfuerzo conseguirlos, sino que impide que el animalito esté siendo parte de una familia; a la vez a nosotros el tener este espacio que él pueda dejar al ser adoptado para seguir ayudando a otros”, acotó.

Al lograr ser colocados en Canadá, detalló, estos perros serán adoptados en cuestión de semanas; a diferencia de aquí en donde pueden pasar años sin que sean considerados para adopción.

“Empezarán a disfrutar sus nuevas vidas y estas familias serán responsables de su atención. Las asociaciones también tendremos la posibilidad de seguir ayudando a más casos de animalitos en necesidad”.

Este programa, señaló, comenzó hace siete años de la mano de asociaciones que llevan a cabo la tramitología necesaria que asegure que terminen en las mejores manos posibles. A lo largo de este tiempo han enviado poco más de 400 perritos a Canadá.

Una vida digna

En cuanto al trámite, Silvia Cortés aseguró que no es complicado en ninguno de los dos países. Para ello, se pide compromiso y responsabilidad para que el animal se mantenga seguro dentro de una propiedad, con libertad de movimiento y disfrutando de una vida digna.

Se requiere, explicó, que toda la familia esté de acuerdo y sean parte de su cuidado, así como que tengan conciencia de los compromisos futuros, tanto económicos como de espacio y tiempo. La asociación realiza una visita al domicilio para verificar dichos aspectos.

“Si todo se encuentra en orden, procedemos a la entrega del animalito que irá a su nuevo hogar desparasitado, vacunado y esterilizado para que no se reproduzca y no sea parte del problema de sobrepoblación en cualquier parte del mudo”, expuso.

Al ser entregado, la familia firma documentos en los que se legaliza su adopción; y se les facilitan sus carnets de vacunación. En el caso de Canadá, incluso se van con microchip.

Edición: Laura Espejo