Adriana T.M. alerta que su vida podría estar en riesgo y pide protección

Adriana T.M. denuncia que, luego de una relación sentimental con G.M., su presunto agresor, quien utiliza el pseudónimo Reza Misino, ha sido amenazada tras interponer una denuncia en la Fiscalía General del Estado (FGE) de Yucatán por diferentes tipos de violencia en manos de su ex pareja.

Tras un año y dos meses de vivir en unión libre, denuncia que Reza Misino le dijo que ya contaba con los recursos para irse y que no se sintiera especial, pues no era la primera vez que usaba a alguien para vivir en donde quería, pues le aseguró que así ha conocido cuatro continentes.

También le dijo que para poder llegar a México le había pagado 10 mil pesos a una joven, llamada Aura, la cual aceptó firmarle los papeles de matrimonio para su traslado hasta aquí.

Con lo ocurrido, cuenta, el iraní comenzó a pedirle que le firmara la factura del auto que le pertenecía a ella, pues se lo quería quedar; Adriana se negó y puso su denuncia en la Fiscalía por todo lo que ahora sabía, incluyendo que la visa de Reza Misino no es de trabajo y él está laborando con un Airbnb.

Fue entonces que las amenazas comenzaron, incluso recibió una llamada de un amigo de su presunto agresor diciéndole que le había comprado el Doge Attitde 2019 a Reza y que le diera la factura a él, a lo cual no accedió, pero decidió enviarle un mensaje a su ex pareja a para pedirle que dejara de involucrar a más personas.

Al responderle, asegura Adriana, Reza le dijo que se vieran para llegar a algún acuerdo, ella aceptó, pero ante la insistencia de verse en Altabrisa y no en su casa, ella optó por decirle que mejor se vieran en otro lugar y finalmente quedaron en City Center.

Una vez allí, ella denuncia que no recibió más que amenazas y, al darse cuenta de que en realidad no habría ningún acuerdo, decidió que pediría su Uber para irse, pero en cuanto se volteó para retirarse, escuchó que Reza gritó y cuando volvió a verle tenía el ojo golpeado; llamó entonces a la policía, sin imaginar, según señala, que todo iría en su contra.

La policía llegó directo a él a preguntarle qué había ocurrido, explica, y, aunque los dos agresores del hombre estaban ahí, Reza comenzó a señalarla a ella como si los hubiera contratado; con esto, le dijo que él tiene el control sobre las autoridades y que se arrepentirá de haberlo denunciado, motivo por el que ella sospecha que todo ya estaba planeado, pues incluso los amigos de él llegaron al momento.

Ella expone que todo esto ocurrió el pasado 19 de marzo y ahora teme por su vida, pues después de los hechos la detuvieron e incluso la mantuvieron incomunicada alrededor de 14 horas y, apunta, lo único que a él le importa es quedarse con el coche y obtener su residencia en México, por lo tanto, ella prevé que al saber que lo denunció estará dispuesto a “hacer lo que sea” para no perder sus objetivos.

Edición: Estefanía Cardeña