Leones y Toros, en momentos contrastantes, vuelven a chocar

Poco más de ocho meses después de que disputaron el séptimo juego de la Serie del Rey, Leones y Toros vuelven a chocar, en el parque Kukulcán, donde los melenudos se quedaron agónicamente cerca de obtener su quinta estrella. 

Un doble de Alex Liddi, a quien las fieras extrañan, ante Fernando Rodney, el histórico cerrador dominicano en Grandes Ligas, empató dramáticamente el quinto duelo en la novena entrada. Un resbalón del jardinero izquierdo Leandro Castro al intentar fildear el batazo pudo llevar al plato la carrera del campeonato en los spaics de Luis Juárez. No ocurrió y Tijuana, que ganó 4-3 en 11 episodios, convirtió una desventaja de 3-1 en la final (llegó a ser de 3-0) en histórico regreso que le dio la corona. 

“Lo que pasó (en la final) son cosas de beisbol, aquí nada está escrito”, afirmó a La Jornada Maya Sebastián Valle, receptor de los melenudos. Ahora, los actuales campeones de las zonas Norte y Sur llegan en momentos contrastantes a su nueva batalla, a partir de mañana. Yucatán trata de salir del fondo de la tabla, mientras que los fronterizos, que eran sublíderes, intentan alcanzar a los imparables Tecolotes. 

Melenudos y bureles se ubicaban antes de la jornada de ayer entre los seis primeros del circuito en efectividad y fildeo, pero los pupilos de Homar Rojas tenían ventaja sobre los de Luis Matos en bateo, .295, por .271. De los titulares de Tijuana el sábado pasado, José Guadalupe Chávez (SS); Junior Lake (JC); Castro (BD) y Xorge Carrillo (C) estuvieron en la Serie del Rey frente a los rugidores. De los selváticos que formaron parte de la alineación anteayer en Oaxaca, Yadir Drake (JD); Walter Ibarra (1B); Art Charles (BD); Sebastián Valle (C); Marco Jaime (2B) y José Juan Aguilar (JC) compitieron en la gran final. 

Poco después del cañonazo de Liddi, los “reyes de la selva” tuvieron otra oportunidad de coronarse, pero una arriesgada atrapada de Lake salvó a los Toros. El dominicano se tiró de clavado para quedarse con una línea de Juárez y comenzar una doble matanza que puso fin al quinto desafío. De haber picado esa bola, los locales, con corredores en primera y segunda, habrían empatado y tal vez hubieran ganado. 

Al final, luego de una pausa obligada por lluvia, que ayudó a Tijuana -los monarcas del Sur estaban al frente 3-0-, los norteños, apoyados en su pitcheo, en especial un extraordinario y profundo bulpén, controlaron a los Leones y no les permitieron batear jonrón, que fue su mejor arma en los playoffs (30 HR), desde el cuarto partido. Sobrevivir en ese quinto choque para regresar a la frontera fue clave. Los bureles (3.09) fueron un poco más efectivos que los selváticos (3.57), que sólo pudieron batear .202. Los campeones de la LMB anotaron 27 carreras en total en la final, tres más que su rival. 

“Puede haber muchos dimes y diretes, pero simplemente Dios no quiso que pasara”, agregó Valle. Yo soy un hombre de fe, pienso que los propósitos de él eran otros. No se nos dio la victoria, pero él es tan bueno que nos da una segunda oportunidad y aquí estamos para eso, para poder demostrar”. 

La serie ante los Toros será la primera para los rugidores contra un norteño en fase regular desde que vencieron 2-1 a Saltillo en el Kukulcán del 16 al 18 de julio de 2019.

Edición: Emilio Gómez