Yandel, el capitán de meseros de 'La Negrita' que ha crecido junto con el bar

A lo largo de siete años de servicio, Yandel Ravell -el capitán de meseros de la Negrita- ha visto crecer el bar y a su vez, ha crecido con él. Laborar ahí le ha brindado un sinfín de satisfacciones, así como la oportunidad de conocer celebridades y superarse personalmente. 

El trabajador comenzó su carrera ocupando el puesto de garrotero, posteriormente fue mesero; estuvo en barra y cocina, hasta que finalmente su tenacidad y buen servicio lo colocaron en el cargo de capitán de meseros.

“Fue un proceso muy difícil por el ambiente en el que estaba antes. Solía salir mucho de fiesta, pero un día decidí hacer un cambio en mi vida. Tuve excesos, toqué mi fondo y hoy ya no bebo ni fumo; estoy dedicado a mi crecimiento”, sentenció.

Para esta transición, reconoció, La Negrita y su directiva ha sido un soporte esencial. Para él, el bar es prácticamente su hogar y asegura cuidarlo como si fuera suyo. “Eso es lo que ellos vieron, mi interés en el negocio, y por eso ahora me lo tienen encargado”. 

Actualmente, abundó Yandel, es una persona que busca siempre tratar bien a toda la gente. Al llegar, los comensales habituales de La Negrita lo saludan efusivamente a la espera del buen trato que reciben por parte de su equipo.

“Ellos (la empresa) siempre fueron muy considerados y vieron algo en mí. Desde que soy garrotero y mesero tengo mi clientela; entonces por eso me ayudaban en el sentido de que hablaban conmigo, me ofrecieron incluso pagarme la terapia”, contó.

Fue gracias a este apoyo que el capitán de meseros del establecimiento tiene hoy a su cargo a más de 30 personas a quienes le transmite sus conocimientos y motiva a salir adelante, tal como él lo hizo en su momento.

A lo largo de su camino por diversos restaurantes y bares de Mérida, Yandel se ha topado con todo tipo de gerentes, buenos y malos. Esto, asegura, le permitió tener una imagen más clara sobre el tipo de jefe que quiere ser.

“Es importante tratar bien a todos los clientes, no ser elitista para que continuemos teniendo esta vibra. Nos enfocamos en que cada cliente se sienta cómodo; y que su experiencia en el lugar sea reconfortante y relajada. Que se sientan en casa”, sostuvo.

Yandel Ravell comentó que hay clientes extranjeros que acuden cada año a La Negrita en busca de la calidez que caracteriza al bar. En La Negrita, reiteró, hay una política de cero tolerancia a cualquier tipo de discriminación.

Clientes distinguidos 

No pocas las personalidades de las artes y el espectáculo han ocupado las mesas de la emblemática Negrita, y desde hace siete años, Yandel las ha atendido a todas, incluso a varias que no tenía el gusto de conocer. 

Por ejemplo, detalló, hace menos de un mes llegaron al sitio Pepe y Ángela Aguilar en compañía de su familia. Esta misma semana se apersonó la actriz Claudia Álvarez, e incluso se han grabado videos como el de María León. 

Del mismo modo, Yandel ha tenido la oportunidad de atender a celebridades que admira desde hace mucho tiempo, como es el caso de los integrantes de la agrupación de rap Cártel de Santa, de quienes se declaró fan.

Armando Manzanero; Rubén Albarrán, Fito Páez y Willie Colón son otros famosos que han departido en los salones de La Negrita. Este último, relató Yandel, llegó para escuchar el vasto repertorio de música cubana con el que se deleita a la concurrencia. 

“Tenemos músicos cubanos internacionales y lo invitaron. Nosotros no lo conocíamos; ‘¿ese señor quién será?’, nos preguntamos. Pues era Willie Colón. Me ha pasado que he atendido a artistas que no reconozco hasta que se van”, compartió.

Edición: Ana Ordaz