Aprendan de sus errores y triunfen: Alejandro Santoscoy, Premio Estatal de la Juventud

Especial: Sensibles, potentes y exitosos

De los cohetes pasó a los satélites, para finalmente “aterrizar” su idea en un vehículo autónomo de monitoreo, análisis y recolección en beneficio del campo yucateco: es Alejandro Santoscoy Rivero, ganador del Premio Estatal de la Juventud en la categoría de Innovación y Tecnología, y quien asegura que en todo ámbito vale pena aprender de los errores para triunfar. 

El proyecto que lo hizo acreedor a dicho reconocimiento corresponde a la trayectoria que ha seguido a lo largo de su carrera como ingeniero físico, y se trata de un vehículo de conducción autónoma que interactúa con los invernaderos para reducir los riesgos a los que están expuestos los trabajadores en el campo agrícola. 

En entrevista, contó que se trata de su trabajo más reciente y detrás de él hay otras iniciativas relacionadas con el área aeroespacial, tales como cohetes hidropropulsados y satélites para monitorear parámetros medioambientales, los cuales le han llevado a competencias en las que ha puesto en alto el nombre de Yucatán. 

Las funciones del vehículo, explicó, fueron aumentando paulatinamente. Lo principal, dijo, es que se conduce de manera autónoma y está diseñado para usarse en invernaderos -como los que abundan en el estado- donde existe gran cantidad de plantas como el chile habanero y la calabaza local. 

“Lo que caracteriza a esos frutos es que muchos de ellos están expuestos a herbicidas, plagas e incluso las mismas plantas tienen cierto nivel de veneno, entonces los trabajadores al recolectarlos de manera manual pueden dañarse, lo que genera perjuicios a largo plazo”, expuso el recién graduado Santoscoy. 

El prototipo con el que cuenta, aseguró, ya lo puede hacer. Sin embargo, está creado para modularizarse continuamente, por ejemplo, uno de sus próximos proyectos radica en equiparlo con un tanque para fumigar, lo que evitaría que las personas tengan que hacerlo, y así no tendrían que exponerse esos químicos. 

La idea, reiteró Alejandro Santoscoy, surgió a raíz de sus proyectos anteriores de cohetes y satélites. Las fechas para presentar su tesis se acercaban y él tenía el ojo puesto sobre la tecnología aeroespacial, específicamente en un rover o astromovil como los que mandan a explotar los terrenos lunares. 

“Y dije: bueno, puedo hacer este tipo de tecnología, pero al mismo tiempo resolver una problemática en Yucatán. Así surgió la idea de hacer un rover adaptado a la problemática de la región”, relató. 

En cuanto a los obstáculos, el joven ingeniero reconoció que el tipo de suelo fue uno de ellos, ya que, al tratarse fundamentalmente de tierra caliza surgieron algunos contratiempos con las llantas. No obstante, con el conocimiento de ello, fue mejorando su prototipo a fin de hacerlo funcional en esa cuestión. 

Yucatán, con gran potencial en tecnología 

A sus 24 años recién cumplidos, Alejandro Santoscoy no esperaba ganar el Premio Estatal de la Juventud y mucho menos todo lo que vendría después. Se dijo emocionado por las oportunidades que derivan del reconocimiento, las cuales, mencionó, utilizará para involucrarse en más proyectos de este tipo. 

“Por ejemplo, convocatorias en las que pueda participar, conocer personas que estén interesadas en esta clase de tecnología y tengan la curiosidad de formar parte de este desarrollo tecnológico en Yucatán. Todo esto pasaba, pero no me daba cuenta y, ahora, gracias a esto, podré formar parte de ese cambio”.

A nivel internacional, detalló Alejandro Santoscoy, existen grandes potencias tecnológicas con las que México podría competir en distintos rubros. Los estados más a la vanguardia, precisó, son Jalisco, Ciudad de México (CDMX) y Monterrey. Por lo menos, apuntó, es lo que la gente suele pensar cuando hablamos de desarrollo tecnológico.

“Pero cuando hablan de Yucatán no ven todo el potencial que pueden lograr los estudiantes. Aquí tenemos educación en ingeniería y escuelas técnicas, lo que nos da mucho potencial, sobre todo en el desarrollo de software”, sostuvo.

“Lo que me da pena es que no todos lo están aprovechando, son jóvenes que tienen el potencial y no lo aprovechan, así que hay que incentivar ese tipo de proyectos, que vayan involucrándose más, para que cuando piensen en la tecnología en México consideren a Yucatán como un estado con gran potencial”, subrayó.

Finalmente, Alejandro Santoscoy envía un mensaje para los jóvenes emprendedores yucatecos: “Los invito a involucrarse más y a no tener miedo. Algunos proyectos pueden sonar amenazantes o como ‘palabras mayores’, pero vale la pena intentar y fallar. Yo he descompuesto un montón de cosas, pero de los errores es de los que más se aprende: aprendan de ellos y triunfen”.

Edición: Estefanía Cardeña