Conoce la propuesta de La Lunar, banda de rock formada en Mérida

La Lunar, una banda de rock formada en Mérida, recién estrena material en Spotify. Son 17 minutos de música rock, con influencias latinas.

La Lunar comienza con Dolores Manzanilla como vocalista y bajista; Rodrigo Díaz Guzmán como guitarrista y cantante; Darío Guzmán como baterista y Mauricio Zoreda como un segundo bajista.

“Tenemos dos bajos y suena pesadón. Mauricio hace cosas hermosas en el bajo. Nos presentamos en algunos bares y decidimos grabar nuestras canciones. Algunas de estas canciones ya las habíamos tocado antes, en otra banda que se llamaba Galera, como 3 am, que es una canción de Orlando Elorza y Rodrigo Guzmán”, comentó Lola Manzanilla, en entrevista con La Jornada Maya.

Algunas canciones del disco de Elegía son obras derivadas, esto quiere decir que toman como inspiración otras fuentes artísticas. La canción Luz sumisa, es una adaptación del poema del mismo nombre del escritor mexicano José Gorostiza.

“En las canciones hay participación de dos metales, que son Franklin Brooks en la trompeta y Jorge Tovar en el trombón. Arturo Guzmán nos ayudó a hacer los arreglos para metales, y también tocó el piano”.

El proceso de grabación fue con Sureste Records. Ricardo Katzuya hizo la mezcla, al final del proceso del máster participó Alex Casillas. Las baterías fueron grabadas por Omar Castro, que escuchó una grabación previa de las baterías hechas por Darío Guzmán. Sureste Records es un estudio y una disquera local que apoya a músicos recientes.

“La propuesta de La Lunar está compuesta por varias suites, son seis canciones, y los géneros que tocamos son rock, como el predominante, pero tenemos la sangre latina, entonces se escucha en Luz sumisa unas trompetas, el son en 3 am, donde también hay unas guitarras psicodélicas. Decidimos hacer así esta suite porque queremos, porque entre otras bandas también escuchamos a Frank Zappa cuando éramos jóvenes”.

Al principio, la producción de los temas no costó trabajo sino la integración. El material tiene una lógica particular, las canciones son distintas entre sí, entonces el armado pretende la unión de estos distintos temas de forma integral y natural.

“La primera canción es rock, y se llama Elegía, que así era cómo nos llamábamos antes. El segundo tema es una obra derivada de una canción de Marcial Alejandro que se llama Luz, que conocemos porque la canta Eugenia León. La tercera canción es 3 am, que hizo Orlando junto con Rodrigo, y en la que Mauricio mete un bajo espectacular. La cuarta canción es Ponta de areia, otra obra derivada de Milton Nascimento, que hicimos compacta. Y la última canción es Luz sumisa, que anuncia la llegada de la primavera”.

La suite se ensayó, en un inicio, de forma desordenada. Fue con el tiempo que adquirió la estructura de los 17 minutos que la componen. Se pueden advertir influencias desde la bossa nova brasileña, hasta el grunge de los noventas, o de bandas anteriores, como Joy Division.

“Yo cantando me sentí la más. En el grupo son mis amigos y crecí con ellos, hay algo que nos une independientemente de las cosas que nos pueden desunir, que es la música. Estuvo muy divertido para mí, ya había estado un tiempo cantando en otros proyectos. Arturo Guzmán me dijo, en su momento, que le recordaba a Rita Guerrero, porque decía muchas cosas cantando. Ella hacía sus rocks góticos pero con mucha poesía”.

En el disco, las voces son de Lola Manzanilla y Rodrigo Guzmán que también toca la guitarra, en el bajo está Mauricio Zoreda, en la batería Omar Castro, Orlando Elorza toca algunas guitarras, Franklin Brooks toca la trompeta, Jorge Tovar el trombón y Arturo Guzmán hace arreglos de percusión, teclado y órganos.  

“En algún punto, Rodrigo quiso poner una grabación de Salvador Allende, pero ya estaba un poquito harta de los discursos hechos por hombres. Ahora, si voy a hacer algo, quisiera que fuera con un discurso de una mujer que no haya sido escuchado. Decidimos incorporar a Aleida Vázquez, que es una poetisa de Guerrero. Finalmente, al inicio de Ponta de areia quedó un pedazo con su voz donde dice que espera que todos tengamos un futuro más amable”.

Lo que sigue para La Lunar es grabar canciones pendientes, que se hicieron entre 2018 y 2019. Por motivos que rebasan los esfuerzos, los integrantes no se han podido juntar a tocar.

Rodrigo ahora vive en Bélgica. La única posibilidad es hacer el proceso de grabación a distancia. La banda en vivo tiene una presencia más cruda que en el material de grabación, por lo que esperan mostrar esta faceta pronto, en caso de juntarse.

En este enlace se puede escuchar el proyecto de La Lunar, en Spotify. 

Edición Astrid Sánchez