“El bullying (acoso escolar) es alarmante, existen muchos reportes de ataques contra alumnos por parte de sus mismos compañeros, agresiones verbales y físicas, incluso varios han terminado en suicidios; este problema se va a ir incrementando por eso hay que tratar de darle solución a través de la educación y la familia”, sostiene el diputado de Nueva Alianza Luis María Aguilar Castillo, quien a través de su iniciativa con proyecto de decreto propone la reforma del artículo segundo de la Constitución Política de Yucatán, para elevar el bullying a rango constitucional y garantizar así que la educación evite el uso por parte de los alumnos de cualquier forma de violencia y la comisión de actos que humillen y ultrajen a las personas.
El legislador considera que al elevar esta conducta a rango constitucional se convierta en una obligación del gobierno estatal el tomar cartas en el asunto, ya que hasta el momento sólo se han llevado a cabo acciones aisladas por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Seguro Social.
“Se trata de evitar cualquier tipo de violencia y al elevarlo a rango constitucional ya sería una obligación, no es nada más realizar acciones de manera temporal sino de manera permanente”, abunda el maestro Aguilar.
Recuerda que fue, justamente, la SEP la que en el ciclo escolar 2014-2015 estableció el Programa a Favor de la Convivencia Escolar (PACE) en los grupos de tercer grado de 18 mil 500 primarias del Programa Escuelas de Tiempo Completo, que se amplió para el ciclo 2015-2016 a 19 mil 372 escuelas del mismo programa y a otras 15 mil 628 escuelas del Programa Escuela Segura.
A partir de las experiencias adquiridas en los dos ciclos en que se implementó el PACE, se decidió ampliar sus alcances y generalizarlo en el ciclo escolar 2016-2017 en todos los grados de educación primaria sustituyéndolo por el Programa Nacional de Convivencia Escolar (PNCE) al cual define como “un programa educativo de carácter preventivo y formativo que se implementa en la educación básica, con el objetivo de favorecer el establecimiento de ambientes de convivencia escolar sana y pacífica que coadyuven a prevenir situaciones de acoso escolar en escuelas públicas de educación básica, propiciando condiciones para mejorar el aprovechamiento escolar”.
Dicho programa plantea la aplicación de una estrategia integral que involucre a los alumnos, los docentes y directivos y a los padres de familia en la prevención y atención de situaciones de acoso escolar.
En su exposición de motivos, Aguilar Castillo estima que con la modificación constitucional contenida con la propuesta legislativa que se plantea se dan las bases constitucionales necesarias para que tanto autoridades como particulares lleven a cabo acciones destinadas erradicar el abuso escolar o bullying, “esto a través de educar a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes en el respeto total y absoluto de los derechos fundamentales de otras personas; se formen en el no uso de la violencia como medio de solución de conflictos o diferencias de cualquier índole, el respeto de la dignidad de la persona humana de sus condiscípulos y en general de todos aquellos que asistan a los centros escolares; no se lleven a cabo agresiones físicas, morales y sicológicas que menoscaben la salud física y mental de otros individuos y provoquen la segregación social; se respeten las diferencias de raza, pensamiento, religión, costumbres entre otras y no se lleven a cabo prácticas discriminatorias”.
Por ello propone la inclusión de contenidos en todos los niveles de educación que informen y concienticen a los alumnos sobre lo nocivo que resulta el acoso escolar en el desarrollo social, personal y académico, entre otros, “debe ser una prioridad y una política de estado, que sea responsabilidad de todos aquellos actores del sector educativo, tanto públicos como particulares”.
Indica que habría que reunirse con los alcaldes, con la Secretaría de Educación del Estado (Segey) para que sea más amplia la cobertura, “pero sobre todo estar haciendo conciencia y señalamientos para exhibir lo peligroso que es el bullying”.
Conforme a datos de la ONG Internacional Bullying Sin Fronteras, ocho de cada 10 niños en México sufren acoso escolar, ubicando a México en el primer lugar en este tipo de conducta.
“Estamos buscando que toda la sociedad se articule para poder ir superando esto”, concluye el legislador.
Edición: Elsa Torres
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