En Yucatán más de 3 mil personas que viven con diabetes: Salud

Itzel Chan

En Yucatán, hay más de 3 mil 900 personas que viven con diabetes y, aunque es una enfermedad que se relaciona directamente con una alimentación poco equilibrada, hay casos en los que pacientes desde su niñez son diagnosticados y no queda más remedio que aprender a vivir con ella. Este 14 de noviembre, Día Mundial de la diabetes, retoma fuerza debido a que este padecimiento resulta en complicaciones con la actual contingencia de salud por COVID-19. 

Hasta el último reporte del 31 de octubre, del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, emitido por la Secretaría de Salud Federal, se estimó que en Yucatán hay mil 823 hombres y 2 mil 162 mujeres que padecen diabetes tipo II, mientras que tipo I, hay cuatro pacientes de sexo masculino y 12, femenino.

Dentro de estos últimos casos, se ubica el de Genaro Sosa Marín, quien desde sus ocho años conoció la diabetes y lleva conviviendo con ella 16 años de su vida, sin embargo, más que víctima de la enfermedad, él se describe como una persona que sólo aprendió a cuidarse más.

Cuando se tiene diabetes tipo I, las personas necesitan insulina para controlar el azúcar en su sangre y Genaro, en su día a día, tiene que hacer un espacio para inyectarse dos veces.

“Cuando era niño, no sabía de qué se trataba esto. Tuve una infancia normal, tranquila, feliz, con mi mamá y hermanos porque sí cuenta mucho que tu familia no te haga sentir una persona enferma o que te limite de capacidades”, argumentó el joven que hoy estudia sicología.

Él dimensionó que no padecía una enfermedad parecida a una gripe común porque veía el esfuerzo que hacía su mamá para que él contara con los medicamentos.

“La gente que llega a enfermar se llega a sentir muy mal y hasta culpable, pero, la diabetes no es un tabú; hablando de ella podemos permitir que otras personas sean empáticas y ayudamos a otras a prevenirla”, detalló.

En parte, admitió que el hecho de estudiar psicología lo hizo porque le gustaría ayudar a las personas que, como él, tienen una enfermedad sin cura.

“En parte sí elegí la carrera porque los pacientes diabéticos necesitan tener salud mental para afrontar de una mejor manera los síntomas, pues al padecer una enfermedad crónica, hay quienes tienden a deprimirse”.

Esta situación es confirmada por Cleopatra Marín, quien expone que su padre ha padecido la mitad de su vida la enfermedad y de un tiempo acá tiene un humor irritable.

“Yo he notado que su enfermedad influye en su humor. Él tiene muchos problemas de inseguridad derivados de su enfermedad porque su aspecto ha cambiado mucho”, compartió.

El papá de Cleopatra, a diferencia de Genaro, ha descuidado mucho su alimentación aun estando en una etapa avanzada.

“No se cuida para nada y a causa de esto, ha sufrido en dos ocasiones pancreatitis y dos infartos. A veces nos dice que ya sabe que va a morir pronto y dice que por eso no va a cuidarse”.

 A pesar de que hace algunos años hizo un intento por cambiar de hábitos, la condición de su enfermedad era muy avanzada y desistió.

Sin embargo, hay quienes han tenido la oportunidad de prevenir, tal como Julia Adelaida Trava Alcocer. 

Ella fue diagnosticada hace dos años como prediabética y desde ese momento, al haber presenciado la muerte de una persona a causa de diabetes, comenzó a cuidarse y cambió radicalmente de hábitos.

“Pues cuando me dijeron que yo era prediabética me asusté y escuché  todo lo qué tenía que hacer para no enfermar y aunque me costó mucho cambié mi forma de comer. Sobre todo, dejé el pan y los refrescos embotellados aunque me gustaban mucho”.

Gracias a que se ha cuidado, es posible que vea crecer a sus nietas y nietos, incluso algunas están a punto de graduarse de una licenciatura.

“Yo digo que todas las personas están a tiempo para prevenir, de cuidarse, de aprender a comer bien”.

Diabetes y COVID-19

Dentro de la población de riesgo por coronavirus se encuentran las personas con diabetes, siendo esta la segunda causa de muerte, después de obesidad, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud Federal.

Incluso, de las más de 2 mil 500 muertes a causa de COVID-19 en Yucatán, hasta el día 11 de noviembre, mil 907 estaban relacionadas con diabetes.

Además, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018, 10.7 por ciento de la población yucateca de 20 años y más, cuenta con diagnóstico médico previo de diabetes.

Edición: Laura Espejo