Urbanismo Slavaje

Eduardo Lliteras Sentíes
La Jornada Maya

24 de Agosto de 2015

La ciudadanía de Mérida pero también de otros municipios de Yucatán y de Quintana Roo rechaza cada vez más el desarrollo urbano salvaje que caracteriza a la península y que ha devastado sus ecosistemas lagunares, costeros y de humedales así como la selva baja y los cenotes. En días pasados en Cancún irrumpieron máquinas en los manglares cercanos al llamado Table –inmediaciones de la entrada a la Zona Hotelera– y arrasaron con mangles rojos habitados por cocodrilos, tortugas y zonas de anidación de una gran diversidad de fauna marina.

Gracias a la denuncia ciudadana, a la que nos sumamos, se pudo detener la total destrucción de los manglares. El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) defendió la destrucción mientras las autoridades federales del medio ambiente se vieron forzadas a actuar ante la denuncia ciudadana. Sin embargo, fueron arrasadas varias hectáreas de manglares hasta que al lugar se le ocurrió llegar la Profepa que “constató el daño causado en diversas variedades de selva baja, mangle y tular así como especies animales”.

Por el momento, las obras del llamado Malecón Cancún-Tajamar fueron detenidas, incluyendo la edificación de una basílica católica. El Centro Mexicano de Derecho Ambiental AC reveló que la Semarnat otorgó un permiso de Impacto Ambiental con información falsa presentada por Fonatur, ¡ya que omitió señalar que había manglares en esa zona! Es decir, estamos ante una simulación que desborda la imaginación de Kafka y que ha permitido la destrucción de manglares en el sistema lagunar Nichupté año tras año.

Pero en Yucatán también se cuecen habas, o más bien gasolinerías, ante la inminente llegada de las transnacionales extranjeras que ofrecerán gasolina, aceites, lubricantes y quién sabe que más a los automovilistas para sentirnos de primer mundo, porque ya no habrá quién nos despache la gasolina a cambio de una propina y las gasolinerías ya no tendrán el logo de Pemex sino de Exxon o Esso.

Huevos motuleños voladores

A huevazos e insultos despidieron los vecinos de Motul al alcalde, Julián Pech Aguilar al cierre de su administración, por la autorización de la construcción de una gasolinería. Centenares de personas acudieron hasta palacio municipal para gritarle al primer edil su repudio a la construcción de una gasolinería en plaza Oasis, misma que desde el inicio fue rechazada por los vecinos y que fue clausurada por no contar con los permisos pertinentes, según dijo la misma autoridad municipal.

Julián Pech Aguilar recitaba quitado de la pena su último informe de gobierno cuando empezaron a llegar los vecinos con pancartas alusivas al repudio de la gasolinería entre gritos y huevazos.

Pero el rechazo ciudadano a convertirse en vecino de una gasolinería, de sus olores a combustible, ruidos todo el día y posibles accidentes tiene numerosos precedentes en Mérida. Para no irnos más lejos en el tiempo, recordemos la batalla contra la gasolinería edificada en la colonia México, ubicada en la avenida 21 entre las calles 14 y 16, gracias a la autorización del Tribunal de Justicia Fiscal Y Administrativa del Poder Judicial del Estado de Yucatán, el que le corrigió la plana al ayuntamiento de Mérida, el que había rechazado la edificación por ser zona residencial.

En días pasados, gracias a un amparo, los vecinos obtuvieron una victoria inédita, ya que se le ordenó al Tribunal de Justicia Fiscal y Administrativa del Poder Judicial del Estado que rehaga todo el proceso y realice un nuevo juicio en el que se incluya a los vecinos afectados, ya que los magistrados “se olvidaron” de su existencia.

Cabe recordar, por cierto, que dicho Tribunal de Justicia Fiscal y Administrativa es el mismo que falló a favor de la empresa AB&C Leasing, dándole toda la razón para que exija el cobro de más de 200 millones de pesos por sus luminarias chinas.

Otra protesta contra otra gasolinera en Mérida tuvo lugar durante el presente año en las inmediaciones del Colegio “Anglo”, localizado en San Ramón Norte.

Padres de familia, alumnos, maestros realizaron una protesta por la construcción de una gasolinería justo en frente del centro educativo localizado en la calle 37-A entre 30 y 32.

En Baca, hartos de accidentes, piden un puente

Otras muestras de la creciente revuelta ciudadana contra el urbanismo salvaje que nos aflige han sido los bloqueos de carreteras por los accidentes mortales y la inseguridad para peatones, niñas, niños, ciclistas, para llegar a sus trabajos y escuelas. El crecimiento del tráfico y de la ciudad se ha dejado en manos de las fuerzas del mercado automovilístico y constructor cuya voracidad de asfalto y nuevas áreas verdes por devastar no tiene límites, a pesar de que vivimos en un planeta (y una península) de recursos limitados y en rojo, por cierto, como señala “Global Footprint Network”, organización que recuerda que en ocho meses, demandamos más recursos renovables de los que el planeta puede proveer.

Pues bien, el último plantón lo protagonizaron vecinos de Baca, los que impidieron el tráfico en la carretera Tizimín-Mérida, cansados de los accidentes mortales y de la sordera de las autoridades.

Algo semejante ocurrió en semanas anteriores en la carretera Mérida-Motul. Vecinos colocaron piedras, troncos y lo que encontraron para impedir el tránsito en dicha carretera a la altura del entronque entre las comisarías de Cholul y Sitpach. Los accidentes, los atropellamientos y la falta de seguridad para cruzar la carretera ante el crecimiento del tráfico y de las edificaciones en la zona son la causa.

Estamos ante otro ejemplo de urbanismo salvaje. Es decir, las personas, los habitantes de las zonas donde el crecimiento urbano está modificando el entorno social y natural, no son tomadas en cuenta. Simplemente no existen para quienes toman decisiones de inversión y para las autoridades de todos los niveles que permiten la multiplicación de gasolinerías, fraccionamientos, plazas, carreteras, negocios de todo tipo en total caos mientras sucumben ecosistemas, árboles, animales.

Cuando veas las barbas de tu vecino cortar

Y bueno, como habíamos anticipado, los recortes presupuestales llegan como guillotinas en los pescuezos de gobiernos estatales, municipales y de los ciudadanos.

A escasa una semana para asumir el cargo de alcalde, Mauricio Vila anunció la aplicación de una “reorganización administrativa” que significa 20 por ciento menos plazas en el municipio, es decir, despidos de personal de confianza.

El alcalde electo fue enfático en señalar que su Gobierno se prepara para lo peor, es decir, para los recortes presupuestales que aplicará la Secretaría de Hacienda en 2016 por la caída de los precios del petróleo, la reducción de la producción de oro negro y la devaluación –esa que dice Videgaray que es algo muy bueno para los ciudadanos–.
En las semanas pasadas también el ayuntamiento de Motul despidió inopinadamente a decenas de policías municipales mientras el municipio de Hoctún hizo lo mismo pero con trabajadores del municipio. Estamos ante el clásico de cada fin de administración, pero ahora recargado, por la escasez de dinero que las reformas –no sólo la crisis internacional– significan para el país.

Osorio Chong en Mérida
por unas horas
Y por cierto, hablando de recortes presupuestales, el gobernador de Yucatán, Rolando Zapata Bello, se reunió en privado con el presidente Peña Nieto quien invitó a todos los gobernadores del país a reunirse con él en una comida amarga en la que les adelantó que los recortes presupuestales afectarán a los estados en 2016, como hemos venido señalando reiteradamente.
La reunión tuvo lugar tras la sesión en la capital del país del Consejo Nacional de Seguridad Pública que celebró su trigésima octava reunión ordinaria en Palacio Nacional.
Otra de las afectados con los recortes presupuestales será la Uady. Sí, la Universidad Autónoma de Yucatán, ya que a todas las universidades públicas les quieren reducir el presupuesto en 2016.
Por último, en la agenda de hoy lunes estará el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien visitará de nuevo Yucatán luego de que la última vez le tocó una protesta de mujeres en un evento público en el Siglo XXI, con todo y gritos en el estrado.
Osorio Chong presidirá la inauguración del nuevo edificio de la sede del Poder Legislativo, en el periférico poniente, en lo que será una ceremonia obviamente blindada para evitar protestas.