Presentan estudio de mercado sobre consumidores en Mérida

Paul Antoine Matos
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Mérida
5 de agosto, 2015

Falta de flexibilidad, mal trato del personal y corrupción, son las principales causas por las que el consumidor yucateco reprueba la calidad de los servicios que ofrecen las empresas, de acuerdo con un estudio realizado por Segmentos Research, agencia regional de investigación de mercados y mercadotecnia.

Ayer, en conferencia de prensa en el hotel Hyatt, José Cab Lugo, director general de Segmentos Research, presentó una radiografía del consumidor yucateco. El estudio señala que existe una tendencia hacia la independencia, la personalización y lo alternativo, elementos que han roto barreras entre los niveles socioeconómicos y sus intereses. También se han abierto oportunidades a inversionistas foráneos que ingresan a la entidad para captar clientes insatisfechos.

Las estadísticas muestran que seis de cada 10 meridanos, sin importar su nivel socioeconómico, calificaron de “malos” los servicios que reciben, tanto públicos como privados. Cab Lugo sostuvo que empresas y gobiernos deben atender las demandas de los ciudadanos, ya que el estudio refleja que quieren ser escuchados y bien atendidos.

Manifestó que los principales factores que ocasionan inconformidad entre los consumidores son la inflexibilidad en el servicio, como los horarios; no otorgar facilidades de pago y la carencia de terminales bancarias. También provoca malestar al consumidor la insatisfacción del personal que atiende las tiendas, debido a que carece de prestaciones sociales o acepta un empleo como última opción. Y destaca la corrupción que, ante la falta de castigo, ocasiona que los clientes no denuncien los malos tratos que reciben.

Además, el estudio de Segmentos Research señala que inversionistas de otras entidades del país detectaron que el yucateco es un consumidor insatisfecho y aprovechan esa circunstancia para adentrarse en el mercado perdido por empresas locales. En la actualidad ocho de cada 10 yucatecos adquieren productos y servicios de marcas foráneas y esto significa que ya no es ventaja ser empresa tradicional yucateca.

Durante cuatro meses, Segmentos Research entrevistó a mil 200 personas de tres niveles socioeconómicos de Mérida: alto, que representa a 12 por ciento
de la población; medio, 36, y popular, que suma la mitad de los meridanos, con 52 por ciento.

El 48 por ciento de los consumidores tiene entre 15 y 34 años de edad, dos generaciones con gran interacción tecnológica, comentó Cab Lugo.

De acuerdo con el censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía 2010, Mérida tiene 830 mil habitantes de los cuales 707 mil están registrados en Facebook. Las plataformas digitales son muy importantes para los consumidores, añadió el director de Segmentos Research.

Indicó que los gustos se han democratizado, lo que permite que una persona de nivel alto pueda asistir a los mismos eventos o escuchar la misma música que una del sector popular.

Esta democratización ha generado consumidores independientes que promueven la comercialización libre, así como el fin de los monopolios y la exclusividad, con el lema “nosotros decidimos”, agregó.

Mencionó que siete de cada 10 meridanos son consumidores independientes y eligen qué comprar de acuerdo con las características del producto y sus necesidades, antes de inclinarse por la marca. Además, 80 por ciento considera que la falta de competencia genera malos servicios.

Señaló que la clase alta basa sus decisiones en el producto, el servicio y las características tecnológicas. Cab Lugo explicó que las grandes tiendas departamentales han dejado de ser frecuentadas por consumidores de este sector y ahora viajan a Miami, Houston o la ciudad de México para satisfacer sus necesidades. El ciento por ciento estas personas tienen tarjetas bancarias y departamentales.

La clase media asiste a las tiendas departamentales que abandonó el segmento socioeconómico alto, y las promociones de ventas son fundamentales al momento de decidir, pero éstas deben ofrecer beneficios inmediatos y reconocer la lealtad, alejándose de rifas, sorteos y cupones, que son vistas con escepticismo. El producto y el servicio completan los requerimientos de este sector socioeconómico. El 78 por ciento cuenta con tarjeta departamental.

Para la clase popular el precio es el primer factor que toman en cuenta antes de adquirir un bien o un servicio, y ubica los comercios que venden más barato. Las
promociones y la plaza también influyen en su decisión.

[h2]Estilos de vida del meridano[/h2]

Apáticos para protestar, religiosos, elitistas, fiesteros, chismosos, conservadores pero liberales y con sobrepeso, es la visión que los meridanos tienen de sí mismos, de acuerdo con el estudio de Segmentos Research.

A pesar de que el catolicismo está arraigado entre la población capitalina, existe una tendencia hacia el pensamiento liberal: siete de cada 10 habitantes son creyentes y están en favor del matrimonio entre personas del mimo sexo; 60 por ciento avala que se aplique la pena de muerte; 70 de cada cien son creyentes y se oponen al aborto, y 56 por ciento de católicos no asiste a misa.

Los estilos de vida han cambiado y también los estándares de la población meridana. Muestra de ello es la proliferación de madres solteras, jóvenes sin compromiso nupcial o que viven en unión libre.

Sin embargo, a pesar de estos cambios, sigue vigente la familia tradicional en la mayor parte del municipio, con mayor presencia en las clases popular.

Cab Lugo consideró que las empresas deben observar estas modificaciones y la aparición de nuevas categorías sociales para enfocar la venta de sus productos de acuerdo con las características del cliente.