Artistas y promotores entregarán un documento al alcalde electo Mauricio Vila

Eduardo Lliteras Sentíes
La Jornada Maya

23 de julio, 2015

Domingo Rodríguez Semerena, ex titular del extinto Instituto de Cultura del gobierno del estado de Yucatán durante la administración del panista Patricio Patrón Laviada, reapareció en Mérida en una reunión con promotores culturales y artistas yucatecos, mexicanos y extranjeros, en la Casa Elena Poniatowska, LA68, con el propósito, afirmó, de presentar propuestas que enriquezcan la visión y las acciones de la dirección municipal de cultura, que dirige Irving Berlín Villafaña, de quien se especula que podría repetir en el cargo en el gabinete del alcalde electo Mauricio Vila.

Acompañado por ex funcionarias panistas (como Diana Canto Moreno, ex delegada de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas), Rodríguez Semerena leyó una propuesta de “política cultural” e invitó a los participantes a enriquecerla.

“Nuestra participación, voces y opiniones son importantes para orientar la tarea del próximo ayuntamiento y para que los esfuerzos municipales en materia de cultura se conviertan en responsabilidad de todos”, señaló.

El ex agregado cultural de la embajada de México en Belice propuso también nueve temas sobre los que, dijo, le gustaría recibir comentarios de los asistentes.

“Siéntanse en libertad de añadir u opinar sobre otros aspectos que consideren importantes”, dijo a los asistentes, y procedió a enumerarlos:

“Restructura, prioridades y objetivos de la dirección de cultura municipal; participación ciudadana y apoyo a las iniciativas culturales independientes, descentralización de la oferta cultural en el municipio, esquemas de apoyo a creadores y proyectos creativos, educación artística y formación de públicos, infraestructura cultural, actividades para entretenimiento de los meridanos y para el turismo, procuración de fondos y mezcla de recursos, transparencia en el uso de recursos e intolerancia a cualquier tipo de corrupción”.

Insistió en que dieran su opinión sobre lo que debe mantenerse en la dirección de cultura del ayuntamiento de Mérida y lo que debe cambiarse, renovarse o desecharse.

Tras leer el texto, que pareció claramente un programa de gobierno en el ámbito cultural, Domingo Rodríguez escuchó las opiniones de los asistentes a la reunión.

El ex funcionario estatal insistió en que la dirección de cultura municipal es obesa y hay que adelgazar la burocracia, propuso reducir los sueldos de los altos funcionarios y planteó desarrollar un debate sobre la gratuidad de las actividades culturales en la ciudad y en el estado, entre otras propuestas.

Comentó que es necesaria la decentralización cultural del municipio y aseguró que falta infraestructura –por ejemplo, en el sur de la ciudad– para equilibrar las desigualdades.

Además, propuso conservar o dar continuidad a programas como la Noche Blanca y consideró que hay que saber buscar recursos en instancias no sólo nacionales, sino internacionales.

Rodríguez Semerena aclaró que la reunión y los comentarios no tenían como la finalidad de “grillar” a las autoridades municipales de cultura y que no se trataba de una reunión proselitista, sino que tenía como propósito que los creadores dejen de ser “entes pasivos e “individualistas”.

Varios de los asistentes hicieron comentarios interesantes y plantearon quejas y denuncias sobre la situación de la cultura en la ciudad y en el estado, y acerca del trabajo realizado por la Secretaría de Cultura y las Artes de Yucatán (Sedeculta).

Se criticó la falta de independencia de la Sedeculta, el abandono y los graves problemas que enfrentan los promotores culturales con la ley de espectáculos vigente.

Se denunció el influyentismo y el compadrazgo en la aplicación de dicha ley, así como la aplicación desigual de la política fiscal, que favorece a los operadores que traen espectáculos masivos al estado y la capital, pero no operan centros culturales en Mérida.

También se exigió apoyo y atención a los centros culturales privados que operan en Mérida con dificultades.

Varios de los asistentes señalaron que habría que proponer a “alguien” para encabezar la dirección de cultura en el próximo gobierno municipal, incluso al propio Domingo Rodríguez, pero éste se negó a “candidatearse” para suceder a Irving Berlín.

En la reunión se reconoció que el tiempo ya está encima –ante la inminente final del gobierno de Renán Barrera– y se solicitó a los participantes que presenten propuestas y elaboren un texto lo más pronto posible, para hacerlo llegar en unos 15 días a Mauricio Vila.

“Próximamente nos reuniremos para revisar el documento final que, seguramente, será rico en ideas y propuestas. De nosotros depende darle seguimiento, dado que es obligación de todo funcionario escuchar y dar respuestas a las peticiones de la ciudadanía”, aseguró.

Cabe señalar que la mayoría de los creadores y promotores culturales no sabían de qué trataría la reunión. Muchos se mostraron sorprendidos e incluso manifestaron su rechazo a la propuesta de impulsar la candidatura de una persona en particular para dirigir la dirección de cultura.

Hubo muchos comentarios críticos por la situación de la cultura tanto municipal como estatal, que además demostraron el creciente malestar que existe entre la comunidad (incluidos artistas y promotores extranjeros) que están fuera del círculo de personas influyentes que son contratadas por la Sedeculta.