Verónica Camacho Chávez
Mérida
27 de marzo, 2015
La reforma fiscal “está ahorcando” a las empresas y es la causa de que actualmente nueve de cada 10 negocios de alimentos y bebidas en Yucatán sean informales, afirmó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) Yucatán, Álvaro Mimenza Aguiar.
“Desde la presentación de la llamada reforma fiscal, como empresarios del sector gastronómico advertimos que sería un atentado contra los negocios, y hoy estamos viendo que no nos equivocamos al ver el cierre de empresas, lo cual por consecuencia trae el incremento de la informalidad”, apuntó.
El presidente de Canirac Yucatán agregó que esa informalidad es la causante en parte de la falta de crecimiento económico del país, ya que la gente que carece de empleo o no tiene liquidez para sobrevivir ingresa al mercado informal, fenómeno que es más visible en el sector de alimentos y bebidas.
Mimenza Aguiar sostuvo que se tiene que ser realistas, ya que tanta tramitología y pagos de impuestos ante las autoridades hacendarias han afectado a las empresas formales, al grado de que algunas se sienten ahorcadas por la carga tributaria, que las obliga a cerrar.
“Lo que pedimos como sector restaurantero es que se dé un cambio radical en la política fiscal del país, ya que los dos últimos años han sido difíciles con la reforma fiscal, a lo cual ahora tenemos que sumar el bajo precio del petróleo y el incremento del dólar, lo cual nos indica que no se tendrá el crecimiento económico esperado”, subrayó.
Finalmente puntualizó que en Yucatán hay cerca de 12 mil establecimientos del ramo de alimentos y bebidas, los cuales generan 65 mil empleos directos, con un crecimiento promedio de entre 7 y 8 por ciento al año.
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