Saber Mirar. La cartelera cultural de Mérida por Gloria Serrano.

No se equivoca el analista político y periodista Francisco Paoli Bolio al escribir, desde lo más profundo de su amor por esta tierra, que “las sombras son patrimonio disfrutable de la humanidad aunque la UNESCO no lo haya decretado”. Ustedes lo saben, hay ciertos rincones del mundo, la capital yucateca es uno de ellos, que sencillamente se regalan, se ofrecen completos a sus moradores y hacen que sus visitantes se rindan a su encanto. La Ciudad Blanca y su calor tan inverosímil son así, se antojan -como dice el Gabo- para “hacer algo tan maravilloso como jugar a estar vivos”. Este fin de semana no es la excepción, además de caminar sus calles y sentir la imperiosa necesidad de hacer un súbito alto en el camino para apreciar esas casas coloniales de antiguo esplendor y balcones oxidados, esta ciudad tiene preparadas diversas actividades gratuitas con las que, festiva, hedonista y desenfadada como sabe ser, le da la bienvenida al equinoccio de primavera.


Es evidente que la esencia mestiza de la península se refleja en la gama de manifestaciones culturales que a diario ocurren. Si lo prefieren, también pueden asistir al Festival de la Trova que se llevará a cabo del 22 al 31 de marzo en el Teatro “Daniel Ayala Pérez”. Lo mejor de la trova yucateca y sus creadores, el bambuco venido desde Colombia, la herencia cubana plasmada en el bolero que internacionalizara el Trío Los Panchos y, luego, Agustín Lara proveyera de un toque citadino. Es la sensualidad que enamora con palabras y voces tan de aquí, como las de Los Juglares o Las Maya Internacional, que le cantan al amor con el sutil acompañamiento de guitarras. Eso y más concentra este festival. Adiestren el oído, expónganse al encanto de la música, les aseguro que no se van a arrepentir.

(Consulten la programación: www.culturayucatan.com)

Un museo es un espacio de encuentro y experimentación que nos provee estímulos inmejorables. Los museos poseen el fabuloso atributo de contener, producir y transferir conocimiento a una audiencia universal. Es la existencia cotidiana convertida en objetos que han permanecido a lo largo del tiempo para narrar nuestra propia historia. Si aún no han tenido oportunidad de visitar la exposición Cuerpo. Colección Museo Soumaya que alberga la Sala 3 del Centro Cultural Mérida Olimpo, les sugiero no dejen de hacerlo. Se trata de 50 magníficas obras de arte, óleos y esculturas, que guardan relación con el cuerpo humano y entre las que destacan las creaciones del escultor francés Auguste Rodin e indispensables virtuosos de las artes como Salvador Dalí, David Alfaro Siqueiros, Pierre Auguste Renoir y Juan Soriano.

La exposición estará abierta hasta el mes de abril en horario de 10:00 a 20:00 horas de martes a domingo. Para apreciar el recorrido con mayor detalle, el Olimpo ofrece el servicio de visitas guiadas en dos horarios, una a las 10:30 de la mañana y otra, por la tarde, a las 16:30 horas. Vayan, observen y siéntanse humildes a la vez que omnipotentes ante la perfección que surge de una capacidad inherente al ser humano, como es el crear. Por cierto, el Centro de Artes Visuales (calle 60 por 47 y 45) inauguró este viernes la exposición colectiva Mujeres que se acercan al arte, una perfecta invitación para descubrir cómo por medio del arte, la mujer de esta y otras épocas, da sentido a su existencia, la argumenta y sale de la marginalidad en un ámbito en el que, con frecuencia, es concebida más como musa inspiradora, que como artista o creadora.

Los infaltables: Los sábados por la mañana, si es posible, dense una vuelta por el Mercado Orgánico que se instala en el Centro Comercial Colón (calle 33 D por Avenida Reforma, por Colón y Cupules), el cual se encuentra abierto de las 9:00 a 13:00 horas. Quesos de oveja, conservas, pan artesanal, café en grano, miel, vegetales cultivados por pequeños productores locales y, lo más importante, un lugar pensado para hacer comunidad, es lo que encontrarán si se acercan a este valioso esfuerzo colectivo. Para concluir el día, la Dirección de Cultura del Ayuntamiento de Mérida tiene dos opciones: el Encuentro con Francisco de Montejo en la Casa de Montejo y la tradicional Noche Mexicana en el Remate de Paseo Montejo; eventos, ambos, que se realizan cada sábado en punto de las 20:00 horas.

El domingo desde temprano, no lo olviden, la fiesta comienza en la Plaza Grande, continua con la Bici Ruta a todo lo largo del Paseo Montejo y, si les parece, pueden prolongarla hasta las 19:30 horas escuchando las Siete palabras de Cristo en la cruz, las siete sonatas y los siete movimientos lentos obra de Haydn, el compositor austriaco padre de la sinfonía y del cuarteto de cuerda, que interpretará la Orquesta de Cámara de Mérida bajo la dirección del Mtro. Rusell Montañez Coronado en la Catedral de San Ildefonso. Insisto: adiestren el oído, expónganse al encanto de la música, les aseguro que no se van a arrepentir.

La trascendencia de un evento no se mide por el número de asistentes, sino por los ríos de conversaciones que genera antes, durante y después de realizado. Sin embargo, eso es algo que sólo quien lo vive lo puede sentir. Cuando digo “evento”, en realidad me refiero a la cultura y a esta tremenda ciudad inminentemente cultural. Así es Mérida íntima, la de Paoli Bolio:


colgar hamaca y mecerme a ritmo de mango zapote
naranja o mamey rasan ciegos al caer la noche
murciélagos y sobrevuelan
aguas sin peces aunque de piscina
luego soy encantado por el verdor oscuro de árboles
al caminar por jardín nocturno encendido de cigarras y aromas
jazmínes galanes de noche mariposas recibo augusta sombra
de ceiba con brazos implorantes como dijera fernando espejo el poeta
plata lunar ilumina la noche

y diminutamente luciérnagas fugaces
presuntuosas esquivas lucen
por las mañanas me disuelvo en el canto tenue
arrullador
acurrucado con tórtolas recién amanecidas
y de nuevo las oigo en la tarde pardeante
gozo mérida desde que pienso volar a la península amada
a sus humorosos calores colgar mis ensoñaciones de la hamaca chirriante
dormir ligero de atuendos…

Y así también es Mérida, personalísima, la que cada uno se apropia, la que cada uno averigua, la que enseña a tomarse el tiempo para mirar y percibir lo que sucede alrededor a través de incontables testimonios y posibilidades.

Como en el génesis según los mayas, los días se echaron a caminar y nos hicieron. Nos siguen haciendo, el fresco invernal ahora cederá su sitio a los calores intensos y los aguaceros pertinaces. Ya se siente que ha comenzado el primer verdor, que la vida renace y nos impide permanecer impasibles e indiferentes. Aunque en ocasiones lo parezca, los seres humanos no somos simplemente un conjunto de carne y huesos que van y vienen. Vamos, contágiense de primavera, no salven ninguna distancia, tengan curiosidad y sientan el desvergonzado impulso de gozar, en primera persona, de una metrópoli que día a día nos muestra nuevos modos de estar juntos para seguir haciendo lo que es resultado del más grande de nuestros talentos: la cultura.