Entrenamiento matemático en Yucatán

Texto y foto: Mónica Mateos-Vega
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Jueves 27 de octubre, 2016

La ruta de México hacia la Competencia Internacional de Matemáticas 2017 (IMC, por sus siglas en inglés), que se realizará el próximo verano en India, inició la semana pasada en Yucatán, sede del primer entrenamiento nacional en el que participan 60 estudiantes de secundaria.

Los jóvenes de 11 a 15 años, provenientes de todo el país, buscan un lugar en los dos equipos nacionales que integrarán ocho competidores, los cuales se medirán contra los mejores matematletas junior del mundo.

Durante días los chicos, del 16 al 20 de octubre, entrenaron de 9 de la mañana a 7 de la tarde en la Secundaria Técnica Número 8 de Yucalpetén, en donde realizaron también los primeros exámenes selectivos.

El anfitrión fue el doctor Didier Solís, de la Facultad de Matemáticas de la Universidad Autónoma de Yucatán, quien apoya al comité nacional de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas (OMM) en la preparación de los estudiantes que participan en todas las competencias internacionales donde México cada día desempeña un mejor papel.

“En estos momentos, el país se ubica entre las mejores 30 naciones de las más de 100 que compiten cada año en la Olimpiada Internacional de Matemáticas (IMO, por sus siglas en inglés), la cual va en su edición 57 y es la más importante de todas las competencias, es decir, estamos ya en el primer tercio, entre los lugares 15 y 30. Por supuesto, nuestra meta es llegar a estar en entre las diez primeras, y para eso trabajamos”, dice el matemático en entrevista con La Jornada Maya.

Los concursos de matemáticas en el mundo se han desarrollado mucho los recientes años, añade, “sobre todo, se han abierto a competidores cada vez más jóvenes, por eso ahora podemos entrenar a niños desde la primaria, los cuales, cuando llegan a los certámenes fuertes que son a nivel bachillerato, llevan entre 5 y 6 años de preparación”.

Es un camino largo, pero a los participantes les encanta. Basta ver el entusiasmo con que los niños y jóvenes acudieron a la secundaria de Yucalpetén, sin importar el calor o que para algunos era la primera vez que tenían enfrente el mar.

La diversión en la playa o en la alberca pasó a segundo término. Primero el entrenamiento, el cual consistió en responder varios problemas de álgebra, geometría o teoría de números. Cuando un compañero pasaba a explicar las respuestas al pizarrón, los demás aplaudían al ver el resultado correcto.

“No son niños genio, simplemente les gusta el reto que implican las matemáticas”, se apresura a decir Didier. “Todos tenemos esa capacidad, el ser humano está hecho para emprender, para enfrentar situaciones problemáticas, y no hay mejor forma de desarrollar esas habilidades que las matemáticas. De eso se tratan las olimpiadas, de estimular a los participantes para que puedan desarrollar su potencial al máximo."

“Sobre todo, deben hacer uso de mucha creatividad, para hallar métodos para resolver problemas cada vez más complejos, deben de crear situaciones que antes no existían en su mente”.

La participación en los concursos de la OMM (que este año cumplió tres décadas) depende no sólo del interés de los alumnos, sino del apoyo de sus familias y centros de estudio, también de la difusión y organización que cada estado haga de las convocatorias.

Por ejemplo, en entidades como Jalisco, Nuevo León y la Ciudad de México hay grupos de estudio en escuelas y sedes para los entrenamientos locales. Todo ello sería vano si no hubiera empeño y dedicación por parte del participante, detalla el doctor Solís, “pues tienen que dedicar tiempo completo a su preparación. Con práctica, se puede hacer un buen papel y llegar a buenos niveles, y acaso convertirse en un competidor excepcional. Es la dedicación lo que los puede hacer llegar a un nivel muy alto.

“Los ganadores de la IMO, sin importar el país, son chicos que le han dedicado muchas horas a las matemáticas, son muy disciplinados y tienen una buena red de apoyo, quizá haya alguno que tenga una capacidad genial de transformar las matemáticas, pero son casos aislados.

“Entre los seleccionados a este entrenamiento podría haber inclusive algún alumno catalogado como malo en matemáticas, pero aquí está y entonces habría que cuestionar a su escuela, por qué lo considera malo, ¿el chico es crítico o se pregunta el porqué de las cosas, o no está conforme con las explicaciones? Lo que hace a un buen competidor para nosotros son todas esas cosas”.
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En la IMO, México con frecuencia le gana a muchos países de Europa, señala Didier, por ejemplo a Finlandia, reconocida internacionalmente como el ejemplo de un buen sistema educativo. En América Latina, el país se turna el primer lugar con Brasil y Perú.

Con respecto a la nueva camada que tendrá varios meses de entrenamientos antes de su participación en la India 2017, el doctor Solís asegura que se trata de chicos “que vienen muy bien preparados, se ve que en algunos estados existe una buena infraestructura y una maquinaria que les permite captarlos y ayudarlos. Tengo buenas expectativas de que los seleccionados (dos equipos de cuatro alumnos cada uno) harán un gran papel en la IMC del próximo año”.

Las convocatorias de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas se pueden consultar en: http://www.ommenlinea.org/