Texto y foto: Héctor Moreno
La Jornada Maya
Motul, Yucatán
4 de octubre, 2016
Sin rebuzno ni reparo, de pronto desapareció Filemón, un burro propiedad de Gilbert Manuel Canul Cupul, quien alrededor de las 4:00am recibió una llamada.
“Si quieres volver a ver a tu burro, tendrás que entregar mil pesos”.
De inmediato, don Gilbert saltó de la hamaca para buscar a Filemón, un burro entre color café, negro con panza y hocico blanco que de pronto desapareció del corral.
Después de unos minutos, don Gilbert recibió una segunda llamada: le indicaban que el intercambio de Filemón por el dinero sería en el parque de Kaxata.
Para evitar ser sorprendido, el hábil plagiario dio nuevas instrucciones.
“Debes ir solo, nada de sorpresitas; si no, nunca volverás a ver a tu burro. Nos vemos en la salida de Motul rumbo a Kaxata”.
El dueño de Filemón no podía creer que alguien se había robado a su consentido.
Sin más, el amo del burro dio aviso a las autoridades; se armó un operativo y al momento en el que el secuestrador Luis Rodrigo Tec Chale recibía el dinero, se le detuvo.
Juró que se encontró de casualidad a Filemón, pero no pudo explicar cómo obtuvo el número del celular del dueño.
El afectado prefirió no interponer la denuncia; al recuperar a Filemón se dio por reparado el daño.
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