Dominante e implacable regreso de César Valdez a México

César Valdez lo hizo de nuevo.

En su regreso a México, el as dominicano se vio tan dominante como cuando condujo a los Leones a la Serie del Rey en camino a ser nombrado Pítcher del Año y a concretar otro notable regreso a Grandes Ligas, y les dio a las Águilas dominicanas, con su plantel lleno de talento de las Mayores, una de sus victorias más importantes de la primera ronda en la Serie del Caribe de Mazatlán.

Apoyado en su mágico cambio de velocidad, con el que asombró en su retorno a la Gran Carpa el año pasado con Baltimore, el experimentado derecho, que pertenece a Yucatán en la LMB, abrumó el lunes por la noche a una alineación de los Tomateros mexicanos repleta de estrellas, capacidad y juventud, y demostró por qué el timonel Félix Fermín lo tiene alineado para abrir una posible final. Carlos Martínez, otro “big leaguer”, abriría en las semifinales. En un estadio, el Teodoro Mariscal, que favorece mucho al pitcheo como el Kukulcán Alamo, Valdez fue implacable: sacó de balance a los mexicanos al hacer una pausa en ocasiones antes de lanzar y poner su cambio y otros lanzamientos en donde quiso. Arriba, abajo, adentro, afuera. Sus disparos fueron indescifrables. Ramiro Peña y Efrén Navarro, que jugaron en la Gran Carpa, mostraron rostros de desconcierto al irse al dógaut ponchados. “Salí a atacar la zona de straic, a todos los bateadores les lanzo igual, yo sé que México es un buen equipo, conozco a varios de sus jugadores y eso me ayudó”, dijo el dominicano, a quien el timonel Benjamín Gil dio todo el crédito; “excelente apertura”.

Valdez maniató a una ofensiva talentosa y con varios recursos como lo hizo para Yucatán contra Monclova en la final de la Liga Mexicana hace dos años. La dejó en dos imparables en seis episodios, con seis chocolates y ninguna base por bolas, en una victoria de 4-2, que puso a los emplumados con 2-0 y propinó a los pupilos de Gil su primer revés.

De repetirse el duelo Tomateros-Águilas en la final, se daría de nuevo el choque de abridores entre Valdez y Héctor Velázquez, el derrotado con un registro en cuatro episodios y dos tercios, en los que dio cuatro pasaportes. Como de costumbre, el que se convirtió en un consentido de la afición yucateca con su joya ante los Acereros en el Kukulcán fue económico y su control y comando fueron impecables. Realizó 79 lanzamientos, 56 straics, y sacó siete auts en rolas y cinco en elevados.

La anterior aparición de Valdez en territorio mexicano, como relevista en el séptimo duelo en Monclova, no es una que quisiera recordar, pero sí sus tres últimas aperturas en un país que quiere y aprecia. Incluyendo las dos de la Serie del Rey, suma 22 capítulos, con 10 hits, cuatro carreras, 27 anestesias y sólo dos bases ante trabucos. ¿Su récord? 3-0 ¡Uff!

Con tremendo plantel detrás de él, parece que ahora sí podría irse del país como campeón.

El equipo de Gil nuevamente usó una alineación cien por ciento nacional. Peña y Navarro, nacido en California, pero hijo de mexicanos, reaparecieron como titulares.