Paul Antoine Matos
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

11 de febrero, 2016

La manzana en la que se construye el Centro Internacional de Congresos está fuera del área de acción del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Las casas que fueron destruidas por la maquinaria del gobierno del estado no eran consideradas monumentos históricos, expresó el delegado Eduardo López Calzada, en entrevista telefónica.

Indicó que “dicha manzana no está considerada en la zona de monumentos, por eso no intervenimos en el proyecto”. Señaló que quienes regulan ahí son la el gobierno del estado, a través de la Dirección de Obras Públicas y la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), al igual que el ayuntamiento de Mérida.

Sobre el cenote que se encuentra en el predio, aseguró que es únicamente un área verde pero sin materiales culturales, mencionó. El área de acción del INAH comprende el Centro Histórico de Mérida, el Paseo de Montejo, la colonia Itzimná y zonas de la avenida Colón, aclaró el funcionario.

Sin embargo, la dependencia sí tomó registros de la zona y realizó recomendaciones, tras una inspección; por lo tanto se indicó que la manzana no se encuentra en la zona de monumentos, reiteró. Tampoco se toman en cuenta los grandes hoteles que se encuentran aledaños, agregó.

El domingo pasado, la maquinaria ingresó a la manzana y comenzó a derruir una casona sobre la avenida Cupules, lo que causó la indignación entre los usuarios de redes sociales por el poco cuidado al patrimonio arquitectónico de Mérida. Meses antes también se derrumbó una construcción que se encontraba sobre la calle 62.

Entre la calle 62, la avenida Colón, la calle 60 y la avenida Cupules, al menos tres casas y una plaza comercial fueron destruidas para preparar el terreno de lo que será el Centro Internacional de Congresos. Las construcciones databan de la década de 1930.

Sin embargo, la que fuera casa de la familia yucateca del escritor Juan Villoro Ruiz, premio Excelencia en las Letras José Emilio Pacheco en la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (Filey) 2016, se mantendría en pie, según los planos del Centro Internacional de Congresos.

En su libro Palmeras de la brisa rápida, una crónica sobre su viaje a Yucatán, Juan Villoro describe a la casa 501, la cual le recordó a Nueva Orleáns, por el balcón y el porche. La contrastó con la Ciudad de México. La capital del país le pareció una urbe mutilada, con un paisaje en perpetua alteración.


Lo más reciente

Centro Contemporáneo del Mayab, antes una decadente oficina, es un ejemplo del Renacimiento Maya

El oficio de vivir

Andrés Silva Piotrowsky

Centro Contemporáneo del Mayab, antes una decadente oficina, es un ejemplo del Renacimiento Maya

El tábano amarillo, una fiera que pica

Especial: Fauna Nuestra

La Jornada Maya

El tábano amarillo, una fiera que pica

—¿En el mundo hay más tristeza o más felicidad?

Las dos caras del diván

Alonso Marín Ramírez

—¿En el mundo hay más tristeza o más felicidad?

Se buscan terrenos baratos

Noticias de otros tiempos

Felipe Escalante Tió

Se buscan terrenos baratos