Ambúja es un emprendimiento ecológico, amigable con el medio ambiente y sostenible, se trata de un proyecto de cosmética sólida: productos de higiene personal, elaborados a partir de los beneficios de las algas recolectadas en las costas yucatecas, como el sargazo.
Venden desde champús sólidos, acondicionadoras, mascarillas faciales, labiales, jabones, desodorantes, cremas, pasta de dientes y desmaquillantes hechos con algodón, entre otros productos.
Paola Tenorio Rodríguez, doctora en Biotecnología Marina y fundadora, comentó que este emprendimiento verde aporta a la reducción del consumo de plásticos de un solo uso y productos que usan químicos tóxicos, y son dañinos para la salud.
La investigadora del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav), explicó que con las algas marinas que recolecta en las costas yucatecas, como el sargazo, elabora productos cosméticos y de higiene personal, los cuales entrega en frascos de vidrio o aluminio, que pueden reutilizarse y reciclarse.
“En Ambúja creemos firmemente que todos podemos aportar nuestro granito de arena para conseguir un mundo más limpio, más sostenible”, expresó.
Uno de los beneficios de la cosmética sólida, detalló, es que se reduce el impacto en la huella ecológica, no necesitamos agua, y al ser productos concentrados tiene una duración más larga a diferencia de los cosméticos convencionales.
Al no usar este líquido el crecimiento bacteriano es nulo, por lo que no se tiene que implementar conservadores que tiene impactos hormonales en los animales. “Al usar productos de origen vegetal ya no necesitas derivado del petróleo”, subrayó.
A su vez, son más amigables con la piel en comparación de los productos comerciales. “La cosmética natural sí nutre, sí hidrata y obtienes beneficios”, destacó.
El proceso de elaboración de producto es artesanal, indicó Paola, en frío, no y usan energía eléctrica.
Información y pedidos: www.facebook.com/ambujamx
Edición: Laura Espejo
Los hechos ocurrieron en el fraccionamiento Sol Caucel; reportan dos perros fallecidos
La Jornada Maya
Los afluentes están localizados en Sonora, Tamaulipas y Chiapas
Gustavo Castillo García
