Aunque el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció homologación de salarios para que ningún trabajador de la educación gane menos de 16 mil pesos, a los empleados del subsistema educativo Colegio de Bachilleres de Campeche (Cobacam) no les ha llegado este pago y por eso realizaron una marcha que terminó en el Palacio de Gobierno pues es la Secretaría de Finanzas que debe realizar la gestión ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La cita fue desde temprano, e incluso estaban invitados otros sindicatos como el del Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos de Campeche (Cecytec), pero no podían aplazar más los reclamos, pues hace seis meses que se hizo el anuncio y hasta ahora sólo les han cumplido a quienes levantaron la voz, por eso tomaron la decisión de marchar.
En caso de no haber respuesta o avances en la gestión que debió realizar Raúl Pozos Lanz antes de dejar la Secretaría de Educación (Seduc) y que ahora debe hacer Víctor Sarmiento Maldonado, las medidas de presión van a ser mayores, en las que incluso pudiera tomarse en cuenta la posibilidad de realizar huelga debido a que Campeche no es la única entidad con estos problemas, señalaron los trabajadores.
La molestia acrecienta, según Isabel May Cardeña, líder sindical del Sindicato Único de Trabajadores del Cobacam (Sutcobacam), cuando están a pocos días de iniciar las vacaciones decembrinas y aún no hay una fecha exacta para que les realicen los depósitos de este retroactivo, pues esta quincena verán si al menos se hace el ajuste administrativo en donde se reflejará el nuevo salario de los trabajadores de la educación.
La líder sindical lamentó que el estado y la Seduc no hayan hecho lo propio, pues son más de 600 trabajadores educativos afectados “que tienen necesidades, que quieren pasar una navidad en familia sin preocuparse por medirse en algunos gastos o limitarse en caso de querer hacer alguna otra actividad relacionada directamente a su salario”, aseguró.
Los trabajadores iniciaron su manifestación en las oficinas centrales del Cobacam, sin que la dirección general del subsistema educativo los limitara o intentara disuadirlos de no realizar la marcha que tenían planeada días antes; durante la marcha un vehículo iba voceando sus demandas para con el gobierno federal y exigían a la administración del Colegio de Bachilleres apoyarlos.
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