Durante más de medio siglo, Nissim Kahlon ha transformado una pequeña cueva en una playa del Mediterráneo en un elaborado laberinto subterráneo lleno de túneles cincelados, pisos de mosaicos detallados y una red de escaleras y cámaras.
Vive en la creación artística única en su tipo, que es un destino popular para los buscadores de curiosidades locales, y Kahlon, de 77 años, se apresura a recibir a los visitantes en su casa subterránea.
Ahora, el gobierno de Israel lo quiere fuera.
Cincuenta años después de que Kahlon se mudara a la casa, el Ministerio de Protección Ambiental de Israel le entregó un aviso de desalojo, diciendo que la estructura es ilegal y amenaza la costa de Israel.
“En lugar de alentarme, me están denigrando”, señaló Kahlon, sentado en su sala de estar con azulejos de mosaico, liándose un cigarrillo. El sol brillaba sobre el mar fuera de sus ventanas orientadas al oeste.
Kahlon vivía en una tienda de campaña a lo largo de la playa de Herzliya al norte de Tel Aviv en 1973 cuando dice que comenzó a arañar los acantilados de arenisca y se mudó a una cueva que él mismo talló.
Con el tiempo, su simple agujero en la pared se convirtió en un castillo de arena de la vida real con esteroides, lleno de madera reciclada, metal, cerámica y piedra. Casi todas las superficies de sus habitaciones principales están cubiertas con elaborados mosaicos, hechos con azulejos desechados de todos los colores que recolectó de los basureros en Tel Aviv a lo largo de los años. Las botellas de vidrio recicladas sirven como decoración y aislamiento en las paredes exteriores.
Cada pared en el complejo laberíntico es curva, y las escaleras se doblan y ramifican a través del lecho rocoso hacia cámaras de diferente diseño y propósito. El complejo cuenta con plomería, línea telefónica e iluminación eléctrica en sus muchas habitaciones, y Kahlon insiste en que su construcción es sólida.
“De las piedras que extraigo hago un molde y construyo un muro. Aquí no hay desperdicio, solo material, esa es la lógica”, dijo. “Todo es útil, no hay basura”.
Kahlon dijo que recibió una orden de demolición en 1974 que nunca se llevó a cabo.
Desde entonces, comenta, nunca ha oído ninguna oposición de las autoridades hasta el año pasado. El desalojo está en suspenso hasta finales de este mes para darle tiempo a apelar.
Reconoce que nunca recibió un permiso de construcción y que el ayuntamiento cerró un restaurante frente al mar que abrió hace años. Pero su principal argumento es que las autoridades locales conectaron su cueva a la red eléctrica hace décadas.
“No me voy de aquí. Estoy listo para que me entierren aquí”, dijo Kahlon, un charlatán brusco pero amable con barba gris y boina. “No tengo adónde ir, no tengo otro hogar”.
La casa cueva de Kahlon está en las afueras de Herzliya, una ciudad costera a 13 kilómetros (8 millas) al norte de Tel Aviv. Se destaca en contraste con las casas de lujo que salpican gran parte de la ciudad junto a la playa, una de las direcciones más exclusivas en un país con una grave crisis de vivienda.
Unos cientos de metros (yardas) al norte de la cueva de Kahlon hay un castillo cruzado, lugar de una batalla entre Ricardo Corazón de León y Saladino hace más de 800 años, así como una instalación abandonada que alguna vez perteneció a Israel Military Industries, un gobierno desaparecido. fabricante de armas de propiedad.
La instalación, donde se desarrollaron y probaron los explosivos, fue abandonada hace casi 30 años después de que una explosión masiva en 1992 matara a dos trabajadores, dañara cientos de edificios y rompiera ventanas en lugares tan lejanos como Tel Aviv. El mes pasado, otra explosión abrió un enorme cráter en el suelo arenoso no muy lejos de la cueva de Kahlon.
Varias autoridades del gobierno israelí se han acusado mutuamente de ser responsables de limpiar el terreno abandonado y contaminado durante décadas. El Ministerio de Protección Ambiental dijo que ha realizado repetidas encuestas para evaluar el alcance de la contaminación.
Sin embargo, no se ha realizado una limpieza a gran escala desde que el sitio fue abandonado en la década de 1990.
El ministerio dijo que el Ministerio de Defensa y el IMI, que fue asumido por el contratista de defensa Elbit Systems hace cinco años, son responsables de la seguridad en el sitio, cuya puerta principal permanece abierta y es con frecuencia el escenario de raves rebeldes, y que "no había No se supone que haya restos de munición real” en el interior.
El Ministerio de Protección Ambiental también dijo que Kahlon había causado “daño significativo al acantilado, puesto en peligro al público y reducido la playa para el paso público” en los últimos 50 años. Dice que la reciente explosión solo aumenta el riesgo potencial para el acantilado.
El ministerio acusó al municipio de Herzliya y a otras autoridades de no abordar la situación a lo largo de los años y afirmó que ha intentado resolver el problema desde 2016. Al final, dijo que emitió la orden de desalojo “para eliminar el daño al medio ambiente costero” y dijo que el municipio de Herzliya encontró una vivienda alternativa para Kahlon.
Mientras tanto, los amigos y la familia de Kahlon lanzaron una campaña de financiación colectiva para ayudar a recaudar dinero para su defensa legal mientras Kahlon continúa con el trabajo de su vida.
Después de una entrevista con The Associated Press, Kahlon se levantó, agarró su andador y un martillo de albañil y comenzó a excavar un túnel cercano.
“Estoy haciendo algo para sentir algo”, dijo. “No puedo sentarme todo el día”.
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