Internacional > Deportes
Ap
19/07/2024 | Las Vegas, EU
Stephen Curry, Tyrese Haliburton, Anthony Edwards, Derrick White y Devin Booker salieron a la duela a calentar para un partido de exhibición en Abu Dhabi como parte del equipo olímpico de basquetbol masculino de Estados Unidos.
Todos fueron recibidos con algunos aplausos. Y entonces llegó LeBron James. La multitud se hizo más ruidosa de inmediato, el volumen subió hasta que retacó un balón en la canasta, lo que fue acompañado con el rugido más fuerte que la arena pudo reunir.
“Sigue siendo LeBron”, dijo el entrenador asistente de Estados Unidos, Erik Spoelstra.
A los 39 años, comenzando la temporada 22 de su carrera profesional, el líder de todos los tiempos en puntos de la NBA, pronto se convertirá en el primer jugador masculino en representar a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos en tres décadas diferentes.
Es por eso que “USA Basketball” lo quería tanto en este equipo que se dirige a la máxima justa deportiva en París, porque no hay duda de que hace que el conjunto de las barras y las estrellas sea aún más favorito para una quinta medalla de oro consecutiva.
James hizo su debut olímpico en 2004, recién salido de su campaña de novato, en el equipo que terminó tercero en los Juegos de Atenas. Volvió en 2008 y ganó el oro, luego fue parte del conjunto estadunidense que compitió en la justa de Londres en 2012, donde triunfó una vez más. No ha jugado en los Juegos Olímpicos desde entonces.
El astro de los Lakers de Los Ángeles va por todo, todo el tiempo, incluso con cuatro títulos de la NBA, un lugar en el Salón de la Fama del Baloncesto, un lugar perpetuo en la conversación nunca resuelta sobre el “Greatest Of All Time” y un patrimonio neto que supera los mil millones.
No tiene nada que demostrar y aún así juega todo el tiempo como si fuera un séptimo partido de las Finales de la NBA.
En París, todo lo que haga y diga James será noticia. Algunos lo aman, otros no, pero todos lo están observando. Después de todo, sigue siendo LeBron.
Edición Ana Ordaz