La Universidad de Oxford dijo el sábado que reanudará las pruebas de la vacuna contra el COVID-19 que está desarrollando con la farmacéutica AstraZeneca, días después de ponerla en pausa cuando un paciente en el Reino Unido reportó un efecto colateral.
La universidad dijo en un comunicado que en pruebas grandes como ésta “es previsible que algunos participantes sufran trastornos y es necesario evaluar cuidadosamente cada caso para garantizar la seguridad”.
Dijo que unas 18 mil personas en el mundo han recibido la vacuna como participantes en la prueba.
Se negó a revelar información sobre la enfermedad del paciente por razones de confidencialidad.
Edición: Emilio Gómez
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