Desalojan a familias y turistas en Tequisquiapan por desborde de presa

Mariana Chávez

Por escurrimientos del río San Juan y de la presa Centenario, que se encuentra al 107 por ciento de su capacidad, unas cien personas entre familias y turistas de la zona centro del municipio de Tequisquiapan, Querétaro han sido evacuadas. Durante la madrugada personal de Protección Civil utilizó lanchas para sacar a niños y tercera de edad que se encontraban en hoteles del pueblo mágico de esa demarcación.

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aplica desde este domingo el Plan DNIII. Las familias evacuadas fueron trasladadas al albergue Casa del Artesano ubicado en el Centro de Desarrollo Comunitario de esa demarcación municipal.

Durante la madrugada de este domingo, personal de Protección Civil evacuó a unas 80 personas que se encontraban como huéspedes en tres hoteles ubicados en la zona centro del pueblo mágico, principalmente a niños y un adulto mayor que estaban en el lugar, reveló personal del gobierno municipal.

El presidente municipal, Antonio Mejía Lira, indicó que la Sedena les prestó lanchas para poder hacer recorridos porque prevén que crezca aún más el caudal del río que atraviesa esa demarcación municipal.

También las autoridades determinaron como medida preventiva realizar corte de energía eléctrica en la zona centro histórico, y la parte baja del Barrio de la Magdalena y Hacienda Grande, además de cerrar las principales vialidades del primer cuadro de esa zona de Tequisquiapan.

En un recorrido que realizaron el presidente municipal de Tequisquiapan, el independiente Antonio Mejía Lira y el General de la 17 zona militar en Querétaro, Elpido Canales Rosas detectaron que la presa Centenario continúa recibiendo escurrimientos del río San Juan. 

Eso ocasiona que el río que atraviesa el pueblo mágico haya alcanzado el cien por ciento de su capacidad por la parte baja del municipio y en la zona centro de esa demarcación municipal.

Autoridades municipales revelaron que la presa Centenario ha vertido 100 metros cúbicos al caudal del río y que esté a su vez genera escurrimientos en la parte baja.

Las autoridades municipales han recomendado a los habitantes de esa demarcación municipal que guarden documentos importantes en micas de plástico, bajar el interruptor de la energía eléctrica, cerrar llaves de gas y agua, así como subir lo más alto que sea posible muebles y electrónicos. También mantener informados sobre su ubicación a algún familiar y refugiarse en el albergue o con alguna amistad.

Algunas familias que viven en la zona centro han determinado proteger sus bienes y salir del lugar ante el temor de que los niveles del agua les afecte.

Personal de la Sedena, auxilia a las familias con la entrega de costales con arena para que funjan como diques y contengan el ingreso del agua a las viviendas.

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Edición: Estefanía Cardeña