El innovador científico mexicano acusado de ser espía ruso en EU

Héctor Cabrera Fuentes se declaró culpable este martes; en Oaxaca lideraba un proyecto médico
Foto: Efe

Héctor Alejandro Cabrera Fuentes, un prominente científico mexicano detenido en Miami, se declaró culpable de espiar a Estados Unidos para un agente del gobierno de Rusia.

Este martes 15 de febrero, ante un juez, admitió haber sido presionado por agentes rusos para que espiara a un informante del gobierno de Estados Unidos que residía en Florida. 

Cabrera Fuentes fue detenido hace dos años en 2020 en el Aeropuerto Internacional de Miami cuando él y su esposa mexicana (la otra es de Rusia) estaban por tomar un vuelo para regresar a su hogar en la Ciudad de México.

Un día antes, el Día de San Valentín, la pareja atrajo la atención de un guardia de seguridad cuando fueron captados por cámaras de vigilancia siguiendo de cerca y tomando fotos a otro vehículo en los terrenos de un condominio del área de Miami. Cabrera fue acusado de actuar en Estados Unidos a nombre de un gobierno extranjero sin notificar al Departamento de Justicia norteamericano.

 

Una fallida misión

La extraña historia de la fallida misión de inteligencia de Cabrera comenzó en 2019, cuando su esposa rusa y sus dos hijas viajaron de Alemania a Rusia para encargarse de un asunto burocrático. Cuando la mujer trató de regresar a Alemania, no se le permitió partir.

Cabrera viajó entonces a Rusia para ver a su familia y supuestamente fue contactado por un funcionario ruso que había conocido años antes en su carácter profesional. El individuo, que no fue identificado en los documentos judiciales, le aconsejó a Cabrera que su familia no debería viajar a Europa ni buscar una visa estadunidense.

Fue en ese momento que Cabrera comenzó a creer que el individuo trabajaba para la agencia rusa de inteligencia FSB.

Luego, en una reunión posterior en Moscú, el mismo funcionario presentó viejos correos electrónicos de la cuenta de Cabrera en los que el científico mexicano parecía estar buscando bienes raíces en Miami.

El funcionario ruso mencionó la situación familiar de Cabrera y le dijo: “Podemos ayudarnos unos a otros”, relató un agente del FBI en una declaración jurada que acompaña a la acusación original.

Por indicación del funcionario ruso, Cabrera viajó a Miami y, utilizando el nombre de un socio, alquiló un departamento en el mismo complejo donde vivía la fuente del gobierno de EU.

El informante que Cabrera estaba siguiendo no fue identificado en los documentos judiciales y fue descrito solamente como una “fuente humana confidencial que previamente proporcionó información sobre las actividades de los servicios rusos de inteligencia que afectan los intereses norteamericanos de seguridad nacional.

 

La trama que rodea el caso

Dos innovadores desarrollos científicos y una cita con la Presidencia de México son los elementos que presuntamente juegan alrededor de Héctor Alejandro Cabrera Fuentes.

Dos días después de que fuera detenido en Miami por supuestamente espiar a un agente del FBI por órdenes del Gobierno de Rusia, el científico mexicano Héctor Alejandro Cabrera Fuentes iba a reunirse en Palacio Nacional con altos funcionarios de la Presidencia de la República para presentar los detalles de un proyecto según se señaló “pretende convertir a la comunidad oaxaqueña de El Espinal en un centro neurálgico para la investigación científica en América Latina”.

En este proyecto estarían interesados instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Secretaría de Marina (Semar), el Tecnológico de Monterrey y hasta la Fundación Carlos Slim.

Así lo aseguran en entrevista con Sputnik dos de sus colaboradores y amigos más cercanos: Hazael Matus, ex presidente municipal de El Espinal, y José Manuel Castillejos, especialista en informática.

El objetivo de este proyecto era que El Espinal se aprovechara de la actividad comercial que detonaría el Corredor Interoceánico para transformarse en un ecosistema de investigación científica a nivel internacional, comparte Hazael Matus. La cabeza del proyecto era Héctor Alejandro, quien desde muy joven aprendió ruso y fue reconocido en  en Alemania, Singapur o Rusia por sus investigaciones en microbiología.

 

También te puede interesar: Sin derecho a fianza, científico mexicano acusado de espionaje

 

Sin embargo, los planes se trabaron cuando en las noticias apareció su nombre. Y no precisamente por haber descubierto la cura de una enfermedad. De acuerdo con las autoridades estadunidenses, el oaxaqueño trabajó como espía para los servicios de inteligencia rusos. Su tarea era localizar el automóvil de un agente del FBI, anotar la placa e identificar su ubicación, según consta en los documentos de la Fiscalía de Florida y el Departamento de Justicia de Estados Unidos.

Cuando lo detuvieron el 16 de febrero de 2020 en el aeropuerto de Miami junto con su esposa, los agentes encontraron fotografías de la placa en un teléfono móvil y Héctor fue acusado de espionaje.

"A él lo detuvieron un domingo y yo platiqué con él el viernes (previo a ese domingo). Me dijo que me quería ver el lunes en la CDMX para cenar. Teníamos una agenda bastante llena: el martes teníamos reunión con Palacio Nacional, el miércoles con diferentes universidades, el viernes con el Tec de Monterrey y el sábado con el gobernador de Oaxaca (Alejandro Murat)", revela Matus, quien asegura que Cabrera estaba a punto de contarle algo "muy importante" relacionado con sus investigaciones.

"Los planes se han alentado (por la detención). Héctor era un promotor fehaciente del proyecto. Si no lo hubieran aprehendido ya casi estaríamos inaugurando el primer centro de investigación. Pero sí se detuvieron bastante. Era muy cercano al gobernador de Oaxaca y al encargado del Corredor Interoceánico, Rafael Marín Mollinedo (uno de los hombres cercanos a López Obrador)", afirma Matus.

 

¿Un espía para Putin?

Ni su familia ni sus amigos ni sus colaboradores creen que Héctor Cabrera sea un espía al servicio de Rusia. Las autoridades de Estados Unidos sostienen que el mexicano aceptó el trabajo a cambio de poder sacar del país europeo a dos hijas que tiene con una mujer rusa.

"Es muy infantil esa forma de hacer espionaje (tomando fotos y persiguiendo un vehículo en una calle privada) cuando ya existen muchas técnicas, lo pueden hacer desde satélites", sugiere Matus, quien es una de las pocas personas que actualmente mantiene contacto con Cabrera vía correo electrónico.

En los mails, sin embargo, el científico no cuenta nada revelador. Todo es revisado previamente por el Gobierno de Estados Unidos. Entre Castillejos y Cabrera sólo hay conversaciones sobre cómo va la vida en El Espinal o cómo se siente estar preso.

Su familia en Oaxaca tampoco es muy abierta a hablar sobre el tema. Prefieren el hermetismo. Lo único que le ha dicho Cabrera a Castillejos es que se siente "bien, tranquilo y confiado". Y que "los periodistas primero deberían investigar qué es una declaración de culpabilidad", en referencia a algunas noticias que dibujaron la posibilidad de que le mexicano fuera sentenciado a cadena perpetua.

Cabrera siempre fue una persona con amplios horizontes, sentenció Castillejos: Lo más fácil para él hubiera sido ser analista de laboratorio (…) Pero lo suyo era el mundo.

El oaxaqueño se forjó una carrera brillante: microbiólogo por la Universidad de Kazán (Rusia), investigador de la Universidad de Giessen (Alemania), de la Universidad Nacional de Singapur y conferencista de la Sociedad Europea de Cardiología.

“Cabrera siempre fue un hombre cercano a su tierra”, apuntó Castillejos. A través de las autoridades locales y la asociación Por Oaxaca más investigadores, impulsó el desarrollo educativo y científico de El Espinal, un pueblo que se caracteriza por los altos promedios de sus estudiantes.

Según cuentan sus allegados, siempre se condujo con un perfil bajo. Actitud que le habría ayudado a tejer redes de apoyo en la comunidad, misma que ahora organiza colectas y venta de artículos para contribuir con los gastos de los abogados que hoy lo defienden en Estados Unidos.

 

Sus proyectos

Hay un par de descubrimientos científicos basados en biotecnología que presuntamente ensombrecen esta historia que, por momentos, parece la trama de una novela de espías: Una crema contra el pie diabético y un innovador método para prevenir decesos por infartos son las razones que inquietan a sus antiguos colaboradores.

Según Hazael Matus, el investigador oaxaqueño había desarrollado, junto con el Tecnológico de Monterrey, una pomada contra el pie diabético. Esta crema, dice, fue creada con nanotecnología y tiene una fórmula secreta.

"(La pomada) ya no salió al mercado. La patente la tenía el Tecnológico de Monterrey. Nosotros (en Oaxaca) hicimos el protocolo de investigación con aproximadamente 300 pacientes. ¿Cómo funciona? Es una curación previa al ataque de la infección. Se pone en las heridas del pie diabético y comienza un proceso regenerativo bastante rápido y así se evita la amputación. (Este producto) le pega a todo, a toda la industria de la salud", afirma el ex presidente municipal.

 

Foto: Sputnik

 

La diabetes es una de las principales causas de muertes en México y el mundo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que afecta a más de 20 millones de mexicanos. En el mundo la situación no es mejor: En 2001, se contabilizan 450 millones de personas con esta enfermedad. Por eso el tratamiento del mexicano era tan revolucionario para muchos.

Uno de sus colaboradores asegura que el Tecnológico de Monterrey eliminó de su página web todos los documentos y artículos relacionados con el tema. Aunque Héctor Alejandro era el director del Centro de Biotecnología FEMSA de esta institución educativa privada toda la información relacionada con él habría sido borrada de los sitios públicos.

Sputnik consultó al Tecnológico de Monterrey para obtener su versión de los hechos, pero hasta la publicación de esta nota no hubo respuesta.

Según un comunicado de la Fundación FEMSA, la crema representa "un salto cuántico para salvaguardar la salud y la vida de los mexicanos".

"Con este nuevo tratamiento se podrán prevenir amputaciones y pérdida de extremidades, lo cual constituye un gran avance en la tecnología médica. Los científicos del Centro de Biotecnología FEMSA que desarrollaron esta innovación fueron encabezados por el director del Centro, Héctor Cabrera Fuentes", añade la organización.

De acuerdo con este documento, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, distribuyó 300 de estos nuevos tratamientos en todo el estado.

 

"Prevenir muertes por infartos no es negocio"

Desde 2017, Héctor Cabrera trabajó para la Universidad de Giessen, en Alemania, en un innovador método para prevenir fallecimientos por infartos.

Se trata de evitar la muerte celular a través de un baumanómetro. El método de este biólogo molecular mexicano está diseñado para ser aplicado cuando el paciente infartado va en la ambulancia. En el recorrido, se previene la muerte en la reapertura de las arterias. De este modo, cuando llega al hospital, es menos probable que la persona fallezca.

"Se utiliza un baumanómetro, que casi en todos los hogares lo tenemos, lo aplicamos en uno de los brazos del afectado, lo inflamos hasta 200 milímetros de mercurio por 5 minutos. Se infla y se desinfla y este ciclo de inflado y desinflado se repite cuatro veces. Es un tiempo de 40 minutos. Lo que hacen es que estos pequeños lapsos de falta de oxígeno es que las otras células se empiezan a defender", explicó el investigador mexicano en un video publicado en Youtube.

Su amigo y colega Hazael Matus asegura que este descubrimiento es algo "completamente contrario" a todas las soluciones médicas que se ofertan en el mercado, ya que no se utilizan oxígeno ni medicamentos.

"Con esa técnica sólo con el uso de un baumanómetro que te cuesta 300 pesos… La realidad es que sus métodos no cuadraban en México ni la medicina anglosajona. No era un descubrimiento con el que se pudieran obtener recursos. Sólo vio por la supervivencia y el bienestar de las personas", dice Matus.

El sueño del científico oaxaqueño era que este método se aplicara en las comunidades más pobres del mundo, donde llegar a un hospital es una odisea.

Además, había acordado no generar una patente, ya que lo único que se necesita es un baumanómetro.

"Esa es una ventaja económica para los servicios de salud que están en vías de desarrollo", dijo en 2017 el biólogo molecular mexicano que hoy está preso en Estados Unidos. 

 

Lee: Diabetes e infartos, principales padecimientos en adultos mayores

 

Edición: Ana Ordaz 


Lo más reciente

Cecilia Patrón expone propuestas en convivencia con medios de comunicación

La candidata a la alcaldía de Mérida destacó su plan de movilidad

Rodrigo Medina

Cecilia Patrón expone propuestas en convivencia con medios de comunicación

Solidarenses pueden agendar cita para mastografía en el DIF

Recomiendan a mujeres de 40 a 69 años a realizarse el estudio para descartar anormalidades en tejidos del seno

La Jornada Maya

Solidarenses pueden agendar cita para mastografía en el DIF

Titular de Sefotur será elegido escuchando al empresariado: ‘Huacho’ Díaz Mena

El candidato expuso ante hoteleros y restauranteros su propuestas en la materia

Astrid Sánchez

Titular de Sefotur será elegido escuchando al empresariado: ‘Huacho’ Díaz Mena