de

del

Francisco J. Hernández y Rubén Torres Martínez
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Martes 9 de enero, 2018

Una vez que los priístas eligieron a su candidato a la gubernatura del estado, los panistas yucatecos fueron muy prácticos y se decidieron por el candidato más competitivo, del que piensan les puede traer de regreso al Palacio de Gobierno de la 60 con la 61. El alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, intentará ganarle al otro Mauricio (Sahui), la silla de Gobernador que los priistas han ocupado durante los últimos dos sexenios. No les importó mucho a los blaquiazules que hubiese un acuerdo nacional, en principio, con el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Movimiento Ciudadano para ir juntos a la elección del 1 de julio próximo. Pensaron que su candidato sería apoyado sin ambages por la escasa fuerza perredista de la entidad.

Se conforma así el cuadro de una nueva generación de políticos jóvenes que aspiran a Gobernar Yucatán y a darle a la entidad, --como todos quisiéramos--, un futuro de consolidación económica y prosperidad: Alpha Tavera, Mauricio Sahui y Mauricio Vila.

El exalcalde de Mérida, abogado, egresado de la Universidad Marista y con estudios de posgrado en la Universidad George Washington, fue gerente regional y es ahora propietario de varias sucursales y franquisitario de la empresa Subway. Cumplirá en plena campaña (marzo) 38 años, ha sido diputado local, y su experiencia de gobierno se limita a los cinco años como presidente municipal de la capital del estado. A pesar de su juventud y de su corta carrera en el servicio público, su capital político está precisamente entre los electores que aprecian su gestión como presidente municipal meridano. Aunque los recientes avances y logros de Mérida deben considerarse en alguna medida compartidos con el gobierno de Rolando Zapata, la parte que corresponde al gobierno municipal de los cinco años recientes es de reconocerse en varios renglones.

Por ejemplo, el desarrollo inmobiliario ha sido impresionante. De acuerdo con la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, Mérida es la cuarta región con mayor inversión inmobiliaria en todo el país, sólo por debajo de las ciudades de México, Guadalajara y Monterrey, con más 2 mil millones de dólares de gasto en el sector, lo que incluye una ampliación de 25 por ciento en la capacidad hotelera de la ciudad.

Por su parte, el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), ha colocado a Mérida entre los primeros lugares en cuanto a su índice de información presupuestal que mide la disposición de los municipios a rendir cuentas. El crecimiento del empleo, los reducidos índices de violencia e inseguridad son condiciones que le han dado a la ciudad reconocimiento nacional e internacional, como una de las ciudades con la más alta calidad de vida.

Sin embargo, Mérida no es Yucatán, y en ese sentido Vila se equivoca cuando dice que puede replicarse en la entidad lo que hizo en la ciudad. El rumbo de Yucatán está marcado por la estrategia económica puesta en marcha por el actual gobernador, y de poco le serviría a los yucatecos que esa estrategia cambiara de orientación en virtud de los alcances que tiene y de los éxitos logrados en diversos ámbitos de la economía y la sociedad. Más bien al contrario, llegue quien llegue a la ansiada silla de gobernador, debe profundizar en esa estrategia, ampliarla y resolver los pendientes y las insuficiencias que ha dejado.

Entre muchos otros está el de consolidar la ubicación estratégica de Yucatán que no se ha aprovechado al máximo y reforzar los vínculos con el Caribe, la costa Este de los Estados Unidos y con la región mesoamericana. La localización de la entidad y el desarrollo de más infraestructura ofrecen una clara oportunidad de fungir como un punto clave de logística, distribución y procesamiento para esas zonas del continente. Además, estas actividades de logística y procesamiento son deseables debido a que por lo general muestran niveles relativamente altos de productividad. En este sentido, los tiempos y la eficiencia portuaria de Progreso son cruciales para enriquecer las oportunidades comerciales y la inversión. Bajar los costos de envío mediante una mayor eficiencia de la infraestructura podría impulsar el comercio y la inversión en todo Yucatán.

Después de la experiencia y el auge maquilador de los noventas, es un hecho que aún hay oportunidades abiertas a actividades intensivas en mano de obra, como las textiles que incluyan el diseño en sus procesos. De igual manera, se requiere inversión e innovación en las actividades primarias, no sólo para mejorar la productividad, sino también para asegurar un impacto ambiental mínimo.

Yucatán debe seguir siendo una región en crecimiento, que supere en el menor tiempo posible su rezago; debe seguir ofreciendo una alta calidad de vida y recursos abundantes a sus habitantes, pero en un horizonte sostenible; debe seguir desarrollando y ampliando los servicios turísticos con beneficios para las zonas rurales; los servicios de salud y educación deben ampliar su cobertura a las zonas pobres y marginadas de la entidad, y abandonar su marcado sesgo centralista en la capital del estado.

En fin, en la ciudad capital del estado, donde se concentra el capital político del candidato, Vila puede reunir un buen número de votos, pero esos no le serán suficientes para ganar la elección. Por eso, tendrá que hacer una campaña que más allá de dirigirse a los propios meridanos y a proponer soluciones a los grandes problemas que arrastra Mérida, tendrá que desplegarse al interior de la entidad, en los poco más de 100 municipios que, fuera de los de la zona metropolitana de Mérida, no disfrutan de los servicios públicos indispensables, la infraestructura, las condiciones de vida de la capital. No se puede replicar en las zonas rurales de Yucatán lo que se ha hecho en la ciudad.

En un sondeo electoral telefónico reciente para medir intención de voto para gobernador entre Mauricio Vila Dosal del PAN y Mauricio Sahuí del PRI, un 31.6 por ciento votaría por Vila Dosal. Por el abanderado priista votaría un 24.4 por ciento, mientras que un 6.4 por ciento se inclinó por la representante de Morena, Alpha Tavera. Aunque la distancia parece amplia para Vila, se trata de un sondeo urbano, que no incluye la gran proporción de electores del interior que pueden definir la balanza en sentido opuesto.

Mauricio Vila es parte de esta nueva generación de jóvenes políticos que aspiran a encabezar proyectos de gobierno con características distintas a las de los viejos políticos que han padecido México y Yucatán. Ojalá que estos jóvenes políticos no se parezcan en nada a los que alguna vez, hace no mucho, nos presentó Peña Nieto, como los políticos que cambiarían a México. Yucatán no se lo merece, y México tampoco.


Lo más reciente

Con 258 votos a favor, diputados aprueban reforma a Ley de Amnistía

El pleno inició la discusión de 71 reservas, aunque 22 serán enviadas al Diario de los Debates

La Jornada

Con 258 votos a favor, diputados aprueban reforma a Ley de Amnistía

Acusan en Texas a más de 140 migrantes por intento de ingreso masivo a EU

No se reportaron heridos durante la supuesta entrada del 12 de abril en El Paso

Ap

Acusan en Texas a más de 140 migrantes por intento de ingreso masivo a EU

Vila a la campaña, primera llamada

Editorial

La Jornada Maya

Vila a la campaña, primera llamada

Los ''jueces del mundo'', sin calidad moral

La Resaca 2.0

Normando Medina Castro

Los ''jueces del mundo'', sin calidad moral