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del

Jesús Hernández Martínez
Foto: www.uqroo.mx
La Jornada Maya

Miércoles 31 de julio, 2019

Un evento ordinario y de rutina oficial: la próxima elección del nuevo rector de la Universidad de Quintana Roo (UQROO), que debiera ser de carácter académico, se ha politizado, al parecer, más allá de lo aceptable. Pareciera que esa rectoría tiende a convertirse en uno de los cargos públicos más deseados por muchos y “premio” o “pago” para algún “buen amigo”.

Ateniéndonos al concepto de Aristóteles, z[i]oon politikón[/i], toda actividad humana contiene algo de política, pero la rectoría de la UQROO comenzó a entenderse como un botín desde que, luego que se publicó hace unos días la convocatoria para renovar a su titular, renunció a su cargo el secretario de Gobierno, Francisco López Mena, quien anticipó que lo hacía para inscribirse como candidato a la rectoría de la UQROO, lo cual se interpretó por los demás contendientes como una designación anticipada del gobernador Carlos Joaquín González.

La UQROO, que abrió hace 28 años, tiene en la actualidad, además de sus instalaciones centrales en Chetumal, campus en Cozumel, Cancún y Playa del Carmen. En los últimos años ya figura entre las instituciones de “muy buena” educación superior en el país. Atiende a unos 5 mil 500 estudiantes en todo el estado. Como otras instituciones educativas del país atiende también a estudiantes extranjeros, principalmente beliceños.

Abrió durante la administración de Miguel Borge Martín, cuando Carlos Salinas de Gortari era presidente de México. Al principio cuando la población no apostaba nada en favor de la nueva casa de estudios, operó en instalaciones prestadas e improvisadas, poco a poco fue construyéndose su edificio propio y central, a la vera de la bahía de Chetumal y en la actualidad, según sus autoridades, ya se consolidó y alcanzó una buena calidad en su enseñanza. Recientemente sus trabajadores se organizaron, tramitaron y obtuvieron la anuencia oficial para crear su sindicato.

Su actual rector es el doctor Ángel Rivero Palomo, (colaborador editorial de [i]La Jornada Maya[/i]) quien entregará el cargo a su relevo el próximo 16 de agosto. Podría reelegirse, pero no se inscribió como candidato. Su sucesor estará en el cargo hasta el 15 de agosto de 2023 con posibilidad de reelegirse. Se inscribieron nueve candidatos, unos catedráticos de la UQROO y otros externos, algunos son políticos y otros sólo académicos. En los próximos días, la Junta Directiva de la UQROO iniciará con las entrevistas de los candidatos, revisará su documentación a fin de comprobar que reúnen los requisitos y, unos días antes de la ceremonia del cambio de rector, dará a conocer el nombre del nuevo responsable de la casa de estudios.

En las últimas semanas ha surgido una serie de críticas, en los corrillos de la UQROO y fuera de ella, en contra de la posible designación de López Mena pero aún no se ha dado la última palabra.

A fin de cuentas no es nada despreciable el sueldo de 236 mil pesos mensuales que, según una página oficial de la UQROO, percibe su rector, muy por encima de los 160 mil pesos mensuales que se le pagan al gobernador del estado. No se sabe si, por la política de austeridad del presidente, Andrés Manuel López Obrador, se reducirán esos sueldos.

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