Sendero jurásico

Vivimos en la era de las noticias. Los medios nos conectan al instante con lo que está sucediendo y es así como millones de personas acompañaron a la familia real en su duelo, dándole más importancia a las muecas y chismes que a la cobertura de noticias que los atropellan realmente como es la guerra contra Ucrania o los tejemanejes de los partidos políticos para hacernos “pajarito, pajarito”, mientras se apropian de nuestras vidas. 

En el 2018 tuve oportunidad de visitar el Museo de Historia Natural en la ciudad de Nueva York, donde descubrí con sorpresa su presunción de que el meteorito había caído en Norteamérica en el mapa en relieve no aparecía el nombre de Chicxulub; no estábamos incluidos en la historia. 

Por eso, es alentador saber que, en junio del 2022, se inauguró el Sendero Jurásico, en un terreno que era un basurero irregular en Chicxulub y que ahora nos da información y ubica como parte medular de un acontecimiento que cambió el rumbo de la historia global.

Por eso, la visita que realicé hace unos días con mis sobrinos me permitió reflexionar sobre la importancia de darles a nuestros chiquitos ese sentido de pertenencia e identidad al visitar una exposición local, que nos permite vernos y ayuda a ubicarnos dentro de la historia universal y su trascendencia al caer en cuenta de que los eventos importantes, también se dan en casa.

Y es así como el Sendero Jurásico nos pone en el centro de la noticia al contarnos, a través de un kilómetro de museo al aire libre, en medio de la ciénega, que el cráter de Chicxulub o “pulga del diablo”, como se traduce del idioma maya el nombre de la población, se encuentra en la península de Yucatán y su centro se ubica cerca de la actual población de Chicxulub, Puerto, comisaria de Progreso.

El cráter, nos explican, mide más de 180 km de diámetro y se estima que el meteorito que lo formó, media 11 km de diámetro. Investigué que fue descubierto por Antonio Camargo Zanoguera y colaboradores geofísicos que trabajaban para Petróleos Mexicanos en busca de yacimientos de petróleo a finales de la década de 1970, pero no pudieron evidenciar esa inusual estructura por falta de apoyo para conseguir pruebas.

Al cabo de los años y de nuevas investigaciones, se descubrió que el impacto habría causado algunos de los mayores mega sunamis de la historia del Planeta. Una nube de polvo, cenizas y vapor habrían extendido el diámetro y área del cráter cuando el meteorito se hundía en la corteza terrestre en menos de un segundo. El material excavado, junto con trozos en la corteza habrían sido expulsados a la atmosfera por la explosión y se habrían calentado hasta convertirse en cuerpos incandescentes que regresaron a la capa terrestre, quemándola y posiblemente provocando incendios globales. Mientras tanto, enormes ondas de choque habrían causado terremotos y erupciones volcánicas a nivel mundial. La emisión de polvo y partículas podrían haber cubierto la superficie entera de la Tierra durante varios años, posiblemente una década. La fotosíntesis de las plantas habría quedado interrumpida afectando a la totalidad de la red trófica, o sea, la cadena de seres que dependen uno de otro para continuar la vida. 

En marzo de 2010, después de largo años de investigaciones y debates en favor y en contra y tras de una revisión de estudios, 38 expertos de Europa, Estados Unidos, México, Canadá y Japón, confirmaron, en un trabajo publicado por la revista Science, que la extinción masiva que se produjo hacia finales del periodo Cretácico, hace unos 65.5 millones de años, y que acabó con el dominio de los dinosaurios en la Tierra, fue originada por el impacto de un asteroide. 

Los dinosaurios, las brujas y los viajes espaciales, estimulan la imaginación de los pequeños, por eso, felicito a la presidencia municipal de Progreso y a los creadores del Sendero Jurásico por su visión y realización del proyecto. Urge aterrizar muchos otros sueños. ¡Tenemos tanto qué ofrecer! 

De lunes a domingo en un horario de 17 a 23 horas.

Más información https://www.facebook.com/SenderoJurasico/

Pd. Comprendí, que el día para amar y ser feliz es hoy. El mañana… ¡plafff! llega en un instante.

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Lea, de la misma autora: Creo en México

Edición: Estefanía Cardeña