Yucatán y la visión de Ebrard

Este fin de semana, el ex secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, uno de los aspirantes a la candidatura de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la Presidencia de la República, estuvo de visita en Yucatán, como parte de las actividades en busca de la coordinación nacional de la Defensa de la Cuarta Transformación.

Entrevistado en el aeropuerto de Mérida por el corresponsal de La Jornada, Ebrard se animó a manifestar su visión del momento de Yucatán e indicó que la entidad recibe los mayores montos históricos de inversiones sociales, sobre todo de carácter social, pero su mayor problema sigue siendo la pobreza.

“El estado de Yucatán está ahorita en un proceso con una de las más grandes inversiones federales de la historia: Tren Maya, plantas de ciclo combinado para resolver el problema de energía, respaldo en otras inversiones que tienen que ver con la modernización del Puerto de Progreso; una inversión social gigante”, expresó el ex canciller en entrevista.

Lee: Con Tren Maya, Yucatán recibe inversiones históricas, asevera Ebrard

Con unos cuantos ejemplos, Ebrard dejó ver que los programas e inversiones que el gobierno federal destinó a Yucatán en los últimos años no le son desconocidos. Incluso al destacar que previamente, “en toda la época del neoliberalismo”, la inversión social en la entidad no había alcanzado más allá del 1.6 por ciento y ahora va en 4.4 por ciento con relación al Producto Interno Bruto, deja la impresión de que se ha preparado para cada una de las entidades que visitará durante la gira de las “corcholatas”.

“Ahora, ¿cuál es el problema mayor del estado desde mi punto de vista? Y se respondió: La pobreza. ¿Cómo es posible que estemos en un estado en dónde se tengan todas esas posibilidades y la pobreza sigue existiendo de una manera importante? Más allá del 45 por ciento de la población”, es un comentario que debiera levantar ámpula en la esfera local de gobierno, aunque también es necesario decir que la administración local ha logrado mover los indicadores económicos de Yucatán hacia niveles positivos.

Pero también quiere decir que la estructura económica y social de Yucatán no está permitiendo que la mayor inversión, el título del estado más seguro y la cifra récord de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social se traduzcan en una mejor calidad de vida para la gran mayoría de la población. Debe reconocerse que hay avances, pero también hallar qué es lo que impide avanzar más rápido en la mejoría económica del 45 por ciento de la población.

Ebrard apunta a crear estrategias de apoyo a la mujer a fin de reducir la pobreza. Aquí, al menos, existe una propuesta concreta de lo que se puede hacer desde el gobierno federal; esto quiere decir que el programa que se cree no será exclusivo para Yucatán, pero sí que su mayor impacto debe darse en el estado.

 Cuando la dirigencia de Morena llama a los aspirantes a que sus discursos se refieran a la necesidad de continuidad de la Cuarta Transformación porque importa más el proyecto que la persona, Ebrard ha hecho en Yucatán, discretamente, un llamado de atención sobre la necesidad de ajustes que requiere el programa de Morena a nivel local. La continuidad del proyecto no quiere decir que éste tenga que imponerse a rajatabla.

[email protected]

Edición: Estefanía Cardeña