La prepotencia y la soberbia que comparten los dirigentes de los partidos que integran la alianza Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI, PRD) y sus promotores de las élites empresariales encabezadas por el magnate Salinista Claudio X. González les han impedido reconocer sus errores para corregirlos de cara a las elecciones presidenciales del próximo dos de junio, que será para ellos la crónica de un fracaso anunciado.
El pasado de los tres partidos, PRI, PAN y PRD los condena. Sin embargo, nunca han aceptado la cauda de abusos que han cometido desde el poder, incluso se atreven a decir y pregonar que México estaba mejor en los gobiernos neoliberales del PAN y el PRI, cuyos monstruosos abusos no hay modo de ocultar, sobre todo desde la normalización de la interconectividad que dejó sin efecto el monopolio de la información.
Las encuestas indican, sin espacio para la duda, que la candidata presidencial de la 4T, Claudia Sheinbaum, ganará ampliamente las elecciones del ya muy cercano 2 de junio. La alianza PRI, PAN, PRD del magnate Claudio X. González apostaron a la ignorancia y al miedo, sin entender que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene la confianza, la credibilidad y el apoyo de la inmensa mayoría de los mexicanos. Los “abajo firmantes”, los periodistas, intelectuales, académicos, empresarios, y todos los que forman parte de derecha conservadora no tienen la fuerza ética para enfrentarlo.
La popularidad de AMLO es cercana al 70 por ciento, Bloomberg destaca que su gobierno deja una economía sólida con moneda fuerte, disminución del desempleo, ganancias en la bolsa, y programas sociales que alivian el impacto de la inflación que afecta al mundo.
El Barómetro Bloomberg del 5 de mayo da a Claudia Sheinbaum 59 por ciento de intención del voto, a Xóchitl Gálvez del PRI, PAN, PRD 29 por ciento y a Jorge Álvarez Máynez de MC un 12 por ciento. Otras mediciones reflejan mayor crecimiento de Álvarez Máynez y la posibilidad real de echar al PRIAN hasta el tercer lugar. El Simulacro Electoral Universitario realizado el 7 de este mes dio en sus resultados un 65 por ciento de los votos a Sheinbaum, un 22.2 por ciento a Álvarez Máynez y en un lejano tercer lugar Xóchitl Gálvez con el 7.7 por ciento. Parece un presagio, un augurio o un fracaso anunciado.
En lo local
La política del país cambiará en cada Estado cuando concluya el gobierno de López Obrador. Sin el “caudillo” los empoderados con AMLO son iguales o peores que sus opositores. Por ejemplo los gobiernos de las cuñadas alcaldesas de Felipe Carrillo Puerto y Othón P. Blanco, Maricarmen Hernández y Yensunni Martínez respectivamente, que buscan reelegirse ¿han sido mejores que sus antecesores? ¿han controlado la violencia y la inseguridad? ¿han sido más eficientes, honestas, transparentes, empáticas?. Hay tanta preocupación en las campañas cuatroteras que el muy gastado Eduardo Ovando, con su hija Paola coordinando, ya convoca reuniones con “Joaquinistas” en Chetumal para Yensunni y el candidato a senador Verde morenista Eugenio Segura, que nunca ha sido empático, tiene cero trabajo social y en su paso como secretario de hacienda en el gobierno de Mara Lezama solo se recuerdan los contratos indebidos multimillonarios a los Olán de Tabasco al cobijo de “Andy”, y avalar absurdos como quitarle la emisión y expedición de licencias a las direcciones de tránsito.
En fin, son cosas que pasan en nuestro país y en nuestro caribeño estado.
¡Hasta la próxima!
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