de

del

La economía turística a 11 meses del cierre inicial

Aunque ya existe la promesa de varias vacunas, el hecho es que el virus sigue mutando
Foto: Juan Manuel Valdivia

El siguiente mes de marzo se cumplirá un año del primer confinamiento en México. Parece que fue ayer cuando las autoridades nacionales formalmente determinaron el cierre provisional de las actividades “no esenciales”. La mayor parte de la población tuvo que encerrarse en sus hogares para esperar en solidaridad a que la pandemia del COVI- 19 pasara. Supuestamente se trataría de una curva de enfermos y muertos que teníamos que aplanar para que el sufrimiento y las afectaciones económicas fueran menores. 

Entre informaciones contradictorias de un elocuente zar “científico” anti pandemias y un Presidente insistiendo en minimizar la amenaza, navegamos la curva por tres difíciles meses con la determinación de “domar la curva” u retomar la normalidad. Nuestro Presidente nos daba confianza afirmando una y otra vez que la curva estaba domada mientras los enfermos se multiplicaban y los muertos se acumulaban en morgues y cementerios. Con un índice de defunción mucho más alto que el resto del mundo y una medición de los reportes de muertos y enfermos controvertida y poco confiable.

Aquí seguimos casi un año después, con pruebas obligatorias para los turistas que no vienen, con restricciones de viaje de prácticamente todos los países del mundo. Nuestra economía se cae, e industrias como el turismo sufren el triple que cualquier otra. México es un país virtuoso en atractivos turísticos y genio en hospitalidad. Un año de falta de ingresos para miles de hoteles, restaurantes, tour operadores, taxistas, meseros, aerolíneas y una cadena de servicios que abastece a la maquinaria turística están en crisis severa. La recuperación no llega. Aunque ya existe la promesa de varias vacunas, el hecho es que el virus sigue mutando y en México los enfermos y los muertos siguen abultando esa curva que en vez de aplanarse parece no conocer la narrativa política.

Regiones turísticas están pasando por el peor escenario posible, la realidad de esta temporada es una tragedia sin precedente en tiempos modernos; sin embargo, en Cancún y la Riviera Maya tenemos otro problema en puerta: cuando menos tres años de destrucción y construcción del Tren Maya, problemas viales que van a dificultar el traslado de las personas y, por consecuencia, las actividades recreativas. 

Ojalá y la terquedad no venza a la razón y se reconsidere seriamente la construcción del megaproyecto. Un tren turístico no servirá de mucho en una región devastada por la pandemia y la construcción del mismo tren.

[email protected]

 

Edición: Laura Espejo


Lo más reciente

Letras incisivas

Memoria hemerográfica

José Juan Cervera

Letras incisivas

Investigan FGE y SSP caso de maltrato animal; rescatan a ocho canes en Mérida

Los hechos ocurrieron en el fraccionamiento Sol Caucel; reportan dos perros fallecidos

La Jornada Maya

Investigan FGE y SSP caso de maltrato animal; rescatan a ocho canes en Mérida

Lo que el agua se llevó

Editorial

La Jornada Maya

Lo que el agua se llevó

Semar emite alerta por niveles de peligro en ríos Suchiate, Pánuco y Mátape

Los afluentes están localizados en Sonora, Tamaulipas y Chiapas

Gustavo Castillo García

Semar emite alerta por niveles de peligro en ríos Suchiate, Pánuco y Mátape