Rosario Ruiz
La Jornada Maya

Playa del Carmen, Quintana Roo
Jueves 2 de julio, 2020

Amenazas cibernéticas, fraude a comercio electrónico, pornografía infantil y ciberacoso son los principales ciberdelitos en Quintana Roo y afectan por igual a hombres y mujeres, de acuerdo con la policía cibernética de la entidad. La incidencia ha crecido durante esta etapa de confinamiento, por lo cual refuerzan los ciberpatrullajes, que es el monitoreo de páginas web.

Daniele Ivette Cano Cruz, licenciada en sicología y encargada del área de atención de la policía cibernética, mencionó que los delitos informáticos o ciberdelitos son todas aquellas acciones o hechos que estén calificados como delitos y vayan en contra de la moral y las buenas costumbres, estos delitos son desarrollados o cometidos mediante el uso del internet y espacios web.

En Quintana Roo, durante el último trimestre de este año, los ciberdelitos de mayor incidencia han sido amenazas cibernéticas, fraude a comercio electrónico, pornografía infantil, ciberacoso, fraude cibernético (telefónica, a la banca electrónica, a empresas, etcétera), extorsión cibernética, divulgación no autorizada, robo de contraseñas, robo de identidad y corrupción de menores.

La palabra ciberpatrullaje se deriva del patrullaje tradicional físico de las unidades policíacas, “en este caso es en la red, constantemente estamos monitoreando lugares, páginas, para identificar si alguien o algún sitio está generando algún tipo de delito”.

La policía cibernética fue creada en julio de 2015 y, de acuerdo con el Periódico Oficial del Estado, es la “encargada de prevenir que se comentan delitos a través del internet; también atiende a los usuarios que son víctimas de algún crimen cibernético con una orientación personalizada según sea el caso”.

En su ámbito de influencia están los delitos que se cometen de forma material como robo, secuestro, extorsión, pederastia, fraudes, entre otros, en algún sitio en la red, llámese redes sociales, blog, página y dominio. Ayuda a la ciudadanía cuando es víctima de [i]sexting[/i] (envío de contenidos eróticos y/o pornográficos a través del uso de celulares o dispositivos móviles y posteriormente publicados en Internet), [i]grooming[/i] (cuando se acosa/abusa sexualmente a un menor de edad por medio de Internet, especialmente redes sociales) y ciberbullying (comportamiento violento, intencional, dañino y persistente, que supone una presión hacia las víctimas que las deja en situación de completa indefensión mediante el uso de internet).

La policía cibernética monitorea diariamente los sitios de internet donde se ofrezcan, promuevan, realicen o se inviten a la ejecución de delitos o aparenten tener contenidos inapropiados y falsos. Difunde información de los delitos cibernéticos en escuelas y centros de trabajo, donde se invita a padres de familia y ciudadanos en general a hacer uso apropiado de sus redes sociales y demás sitios web que visitan. Enseña a la ciudadanía acciones de prevención para ser víctima de un delito e invita a la ciudadanía mediante el uso de redes sociales para que realicen sus denuncias y difunde alertas sobre delitos en el ciberespacio que se cometen con mayor frecuencia.

Los delitos cibernéticos se encuadran en los delitos ya existentes en el código penal del estado de Quintana Roo y en el Código Federal de Procedimiento Penales, de los cuales “nosotros nos regimos para determinar si los eventos que son recibidos por medio de la atención que proporcionamos conforman las características de un delito o no. Dependiendo del delito y de la gravedad en algunas ocasiones pueden perseguirse por oficio, pero la mayoría de las investigaciones con respecto a delitos cibernéticos son por querella, es decir, debe existir una denuncia previa ante un ministerio público”.

Cada delito tiene características diferentes y las penas varían según su naturaleza, tipo de delito y los agraviantes que tengan, como lo dice el artículo 4to del Código Penal del estado: “La medida de la pena estará en relación directa con el grado de culpabilidad de la persona respecto del hecho cometido, así como de la gravedad de éste” y conforme al artículo 2do sólo se impondrá pena cuando se acredite la existencia de elementos del tipo penal que acrediten que se trata de un delito. Puede haber penas de hasta 50 años.

[b]¿Cómo afecta un ciberdelito?[/b]

Muchas de las víctimas de ciberdelito tienen un impacto emocional que genera un problema en su vida social, laboral y personal, algunos manifiestan síntomas de depresión mayor y puede llegarse al suicidio, explicó Cano Cruz.

“La víctima de un ciberdelito se siente con baja moral, que todo el mundo la está viendo, tiene pensamientos negativos, cree que todos le están juzgando, hace comentarios como que ya no puede más o está muy cansado de la situación. Eso genera baja autoestima, problemas en el trabajo en los adultos y en el caso de menores no quieren ir a la escuela, dejan de jugar, todo su entorno se ve afectado”, mencionó.

“Tratamos de calmar a la víctima para que podamos recabar toda la información y posteriormente se hace la canalización a diferentes instancias gubernamentales o particulares para el seguimiento sicológico de manera personal. Brindamos también asesoría técnica para que la víctima pueda bloquear al victimario, entre otras características que le dan los técnicos del área para que ella o él pueda tener una mejor privacidad en sus redes sociales y medios electrónicos que usa”, destacó.

La policía cibernética establece que en el área de atención a estos delitos la víctima tenga una asesoría legal, esto es que se le asesore sobre cómo deberá proceder y si lo que está viviendo es un delito o no. Quienes sean afectados por este tipo de delitos pueden contactarlos al correo electrónico: [email protected]. También brindan atención telefónica en el 089, vía WhatsApp al 9982385842 o en Facebook: [a=https://www.facebook.com/CiberneticaSspQroo]https://www.facebook.com/CiberneticaSspQroo[/a]. Igualmente trabajan en coordinación con el 911, de donde les canalizan a los denunciantes de esta área.

Cano Cruz detalló que el delito de ciberacoso sólo aplica para menores de edad, en el caso de los adultos se califica como violentar la intimidad personal. En el ciberacoso entran conductas como el [i]grooming[/i] o el [i]sexting[/i].

Manifestó que Cancún es la ciudad con más acceso al internet, “por lo tanto somos más propensos de recibir este tipo de ataques, estadísticamente nuestra vulnerabilidad como estado es elevada, por ello a nivel nacional el estado de Quintana Roo está trabajando para que pueda tener un alto índice de prevención del delito”. Mencionó como uno de los logros recientes el erradicar las amenazas cibernéticas por saqueo al inicio de la contingencia sanitaria.

Aceptó que con el confinamiento hubo un incremento en los ciberdelitos “a raíz de que la gente estuvo en casa, al estar navegando más tiempo en internet porque tenemos más tiempo de ocio. El delincuente cibernético se encarga de buscar una vulnerabilidad dentro de la red, cualquier situación que él pueda encontrar para poder entrar lo va a hacer;
derivado de ello estamos planeando una campaña de prevención en línea”.

[b]Bajan denuncias por extorsión[/b]

De acuerdo con las estadísticas de la dependencia, en comparación al 2019 a lo que va del año 2020 hubo una disminución del 37 por ciento en las llamadas recibidas en el 089 (número anónimo) por el tema de extorsión. Esto lo atribuyen a las diferentes campañas de prevención antiextorsión que se han dado a través de la Secretaría de Seguridad Pública, además de la aplicación que puede descargarse desde la [i]playstore[/i] de los celulares y que tiene la característica de levantar una alerta en caso de una llamada de extorsión.

Dentro de las recomendaciones generales están descargar la aplicación que se ha desarrollado para detectar números de extorsión, mantener la calma en caso de darse cuenta de que está siendo víctima de extorsión y comunicarse al 911, 089 o policía cibernética para que le den las recomendaciones adecuadas según sea el caso.

“Hay que seguir con las diferentes recomendaciones para este tipo de delitos que se cometen en todo el país. En este primer cuatrimestre de lo que va del 2020 los municipios con más residencia en el delito de extorsión son Solidaridad, Othón P. Blanco y Benito Juárez, ocupando Solidaridad el primer lugar en presentar denuncias por este delito con un 34 por ciento”, externó Cano Cruz.

“La policía cibernética trabaja en la prevención y seguimiento de este tipo de delitos; las nuevas modalidades de delincuencia ahora se han estado migrando a los medios informáticos, haciendo uso de las plataformas digitales, redes sociales y otros, ya no solo la extorsión se da por medio de un teléfono, por eso las recomendaciones varían de acuerdo al tipo de extorsión que la víctima está teniendo”, concluyó.

Edición: Ana Ordaz


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