Luis Alegre, representante de la Presidencia de la República para el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional de Tulum ante la sociedad civil de Quintana Roo, consideró que el proyecto del tren es de suma necesidad para el destino ante el crecimiento que ha superado por completo la infraestructura actual. Desde su trinchera, dio a conocer, se ha reunido ya con espeleólogos, ambientalistas y voces en contra del proyecto, para intercambiar puntos y avanzar no en un debate ni en una confrontación, sino para dialogar.
“Yo la verdad sí creo en el proyecto, soy consejero de la asociación de hoteles, medio de comunicación, empresario, soy multifacético en ese sentido y estoy netamente convencido de que necesitamos más infraestructura para el desarrollo económico de Quintana Roo”, apuntó.
Desafortunadamente, reconoció, lo que ha hecho falta ha sido tener más datos sobre un proyecto como este, lo que ha provocado desinformación e incluso sensacionalismo basado en datos erróneos, por lo que a través de diferentes grupos y ahora del frente conformado a favor del proyecto, buscan justamente socializarlo y compartir los beneficios que traerá.
Quintana Roo, enfatizó, vive del turismo, pero se tiene que crear la infraestructura adecuada para las poblaciones que hoy se mantienen desarticuladas y no se desarrollan adecuadamente por la falta de comunicación.
“Recibimos muchos trabajadores de otros estados y dejan a sus familias, no los ven en meses, el Tren Maya servirá para recuperar la integración familiar; no se diga de la derrama económica que esto va a generar… otra cosa que no se ha hablado es que además de las vías del tren, vendrán vías de carretera, a la par de la 307, todo esto va a servir para mejorar la infraestructura del estado y tener vialidades alternas, porque el desarrollo económico del estado ha superado la infraestructura y necesitamos más para seguir el desarrollo”, enfatizó.
Respecto al impacto ecológico, aseguró que el 95 por ciento de las zonas por las que pasará el tren ya estaban afectadas, es decir, que solamente se está generando un cinco por ciento de impacto, pero que van a la par del ordenamiento territorial y se está trabajando en la reforestación de 25 mil hectáreas a través de Sembrando vida.
Por último, en relación con los amparos interpuestos contra el tramo 5, los cuales ya fueron resueltos en favor del proyecto, opinó que se debe empezar a cuestionar de dónde viene la crítica, porque aun cuando los jueces federales han admitido los amparos, cuando se subsana se revoca la suspensión y persisten las posturas.
En el “pueblo de Quintana Roo queremos el Tren Maya, obviamente queremos que se hagan las cosas bien, hay que entender una cosa, la perfección es el enemigo de lo bueno, hay que buscar lo bueno… se están subsanando elementos, todos tenemos derecho a acudir a instancias judiciales, todos somos derechohabientes del medio ambiente, cualquiera puede presentar una queja, pero los jueces federales han analizado el cumplimiento de las deficiencias que se han venido subsanando, ayer se levantaron otros dos amparos, entonces el proyecto del tren va encaminado, siempre es mejorable y lo importante es no irnos con la desinformación y el fin que es la infraestructura para desarrollarnos”, puntualizó.
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