Pese a la reciente declaratoria de playas limpias de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), los paradisiacos arenales de Cancún empiezan a alejar a los vacacionistas que empiezan a llegar a otros balnearios, pues por el temporal provocado por el frente frío número 43 trajeron, literalmente, mantos de sargazo que sirve de morada para millones de pulgas marinas que están causando escozor en la piel de los bañistas.
La atracción incluye un árbol de 20 metros, similar al del Remate de Montejo
La Jornada
La COP deja un sabor a fracaso y desconsuelo
Rafael Robles de Benito