Graciela H. Ortiz
Foto: Enrique Osorno
La Jornada Maya
San Crisanto, Yucatán
Miércoles 19 de febrero, 2020
“Nadie nos puede negar el derecho a ser autónomos, lo dice la Constitución en su artículo segundo, que reconoce y garantiza el derecho de los pueblos y comunidades indígenas a la libre determinación, porque de nada nos sirve tener una representación municipal cuando hay un abandono total en los servicios públicos; el cabildo de Sinanché ha visto a San Crisanto como una forma de captar recursos sin invertir en la comunidad”, aseguró José Inés Loría Palma, director de operación del ejido de San Crisanto y presidente de la Fundación San Crisanto.
Loría Palma acudió al Congreso del estado a recibir, de manos del presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Felipe Cervera Hernández, y del director del Instituto de Investigaciones Jurídicas, Sergio Martínez Cachón, la traducción al maya del documento que será base para constituir la junta de pobladores como órgano auxiliar del ejido para servicios públicos de San Crisanto.
“El documento se creó tras un proceso de consulta en San Crisanto, lo único que le pedimos al Congreso fue su traducción al maya; lo generamos nosotros en la comunidad y trata de reglas generales, la organización, las responsabilidades, obligaciones y derechos que tenemos como ciudadanos, a qué nos comprometemos y cómo participamos”, detalló Loría.
Añadió que han tenido infinidad de reuniones con Felipe Rojas Escalante, presidente municipal de Sinanché, “pero siempre la respuesta es negativa para mejorar las condiciones de San Crisanto”, y apuntó que son una comunidad que ha luchado 45 años para salir adelante, sin tener que depender del municipio, ya que las obras que se han llevado a cabo en San Crisanto las ha hecho el ejido, “entonces ¿para qué necesitamos al municipio?”
Señaló que formarán un consejo directivo con 13 personas, cuatro jóvenes, cuatro adultos y cuatro adultos mayores, mitad hombres y mitad mujeres, quienes serán los responsables de operar la administración pública de la comunidad, y uno que tendrá el voto de calidad en caso de empate.
“Vamos a darle formalidad a la constitución de la junta de pobladores, y una vez que esté constituida y autorizada por la asamblea convocaremos a los avecinados a que nombren a los representantes dentro de la junta”, abundó.
Afirmó que San Crisanto tiene la capacidad de generar sus propios recursos, “pero además con la autonomía, el Estado está obligado a proporcionar servicios de manera especial, adicionales a los programas normales, y el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) tiene que velar por esos derechos”.
Como informamos ayer, el presidente municipal de Sinanché expresó que no ve factible que San Crisanto sea una comunidad indígena autónoma porque no cuenta con los recursos legales para conseguirlo.
San Crisanto está ubicada en la costa central del estado, a unos 50 kilómetros de Progreso; vive de la actividad pesquera, producción de sal y cocos.
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