El lemacto coronado, mejor conocido como toloque coronado es una especie nativa de los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, aunque sí se ha notado presencia en otros estados de la república mexicana e incluso en el país de Belice, especialistas indican que se caracteriza por ser controlador de plagas de diversos insectos.
Distinguido por ser una especie que le atrae a la niñez por su color verde, el toloque es posible verlo en casi cualquier zona de vegetación, incluso a los alrededores de la ciudad.
De acuerdo con el especialista Luis Fernando Díaz Gamboa, director general de la Red para la Conservación de los Anfibios y Reptiles de Yucatán (RCARY), una de sus principales características es que cuenta con un casco en la parte trasera del cráneo y tiene unos bordes aserrados o dentados en ella.
“Sus características le hacen parecer un animal prehistórico aunque no lo es, pero para la niñez parece un pequeño dinosaurio”, indicó.
Luis Fernando dijo que precisamente esta característica peculiar que llama la atención entre las niñas y niños lo ponen en algún tipo de riesgo, ya que suelen capturarlos y llevárselos a sus casas como mascotas y esto interviene en su hábitat.
Es posible observarlos comúnmente en los árboles y se distingue también por tener extremidades largas que le permiten trepar y colocarse cerca de plantas en los cuerpos de agua.
Este reptil se alimenta de insectos y por ejemplo, algunos pueden ser tan activos en la noche que pueden consumir más de 50 individuos, lo que entonces contribuya a que sean controladores de plagas.
Los toloques son conocidos también por mover de forma peculiar sus cuellos, como si hicieran una especie de mímica de afirmación o negación como los humanos, pero en su caso, lo hacen al momento de posiblemente ver una presa o de sentirse en estado de alerta.
Es en sí un lagarto mediano con una cola extremamente larga, de aproximadamente 3.5 veces la longitud del cuerpo.
Sus brazos y patas son largas y delgadas, además cuenta con una serie de espinas cónicas alargadas que bordean el margen posterior del casco.
Estos lagartos son usualmente verdes, pero pueden cambiar rápidamente de verde a café.
El especialista comentó a través de una ficha técnica que en la fase verde, el fondo es verde claro, con cuatro o hasta cinco bandas de color café oscuro. Por otra parte, en la fase café, el verde claro regresa a un claro o medio bronceado.
Muchos especímenes tienen una mancha crema o blanca inmediatamente posterior a la inserción de los brazos.
Reproducción
Este ejemplar es ovíparo, y deposita de tres a siete huevos. Su época reproductiva inicia en primavera o principios del verano.
La hembra excava un pequeño agujero al pie de algún árbol en donde deposita los huevos, tapándolos después.
La eclosión de los ejemplares juveniles es a finales del verano.
Protección especial
Actualmente la especie está sujeta a protección especial, al menos en la categoría de preocupación menor, en la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y está sujeta a protección especial en la Norma Oficial Mexicana (NOM)-059.
Como cada viernes, La Jornada Maya te invita a conocer la fauna endémica del sureste mexicano. Aquí te compartimos la colección que tenemos hasta el momento. ¡Disfrútala!
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