Ejidatarios de Chablekal se manifestaron este 5 de julio en las puertas del Instituto Nacional de Antropología (INAH) de Yucatán, exigen el pago por la expropiación de 53 hectáreas que están dentro del Parque Nacional Dzibilchaltún, un problema que tiene 62 años sin solución, según señalaron.
Con pancartas en mano, los campesinos de esta comunidad bloquearon el acceso a las instalaciones del Centro INAH y exigieron el pago inmediato de la indemnización por sus tierras.
“Tenemos miedo al Covid-19, pero tenemos más miedo de morir de hambre. 62 años sin solución”, “propiedad del ejido de Chablekal, se exige convenio de ocupación previa”, fueron algunas de las leyendas que se observaron en las cartulinas de los manifestantes.
Asimismo, desde el viernes pasado, varios ejidatarios de esta misma comunidad también cerraron el acceso a la zona arqueológica de Dzibilchaltún por la misma situación.
Los manifestantes detallaron que desde hace más de 60 años el instituto se apropió de más de 50 hectáreas de su ejido, sin que se les retribuyera nada.
José Teodoro Tut Chalé, secretario del ejido, señaló que piden que el pago de la expropiación se haga de manera rápida, sin embargo, ya tiene más de un año que se acordó hacer mesas de diálogo.
“En un año no hicieron nada, nada. Siempre damos vuelta, dicen que los papeles se han enviado en México, y ahí no se sabe nada de la expoliación de Chablekal, no hay ningún documento que diga que se ha promovido esto”, manifestó Tut Chalé. El ejido ya está cansado de que las autoridades del INAH nos estén engañando, sentenció.
Por su parte, Eduardo López Calzada, director del Centro INAH Yucatán quien salió un momento para hablar con los pobladores, pidió no radicalizar sus posturas y mantener el diálogo.
“El objetivo del instituto es que, a través del diálogo que se ha mantenido durante generaciones, la comunidad de Chablekal se recupere en las mejores condiciones” expresó.
Esto se va a propiciar, de acuerdo con el funcionario, al no abandonar la mesa de diálogo ni radicalizar los acuerdos que se puedan dar. “El procedimiento no es sencillo, nunca lo ha sido, los procesos de expropiación, aun consensuada, llevan tiempo y años”, indicó.
Hay muchas condiciones y particularidades que hay que evaluar en materia de la tenencia de la tierra de bienes nacionales, expresó. “Lo que siempre hemos ofrecido es mantener una mesa de diálogo, entendemos que estén cansados en algún momento, pero tenemos que ofrecer la permanencia del diálogo”, insistió.
Además, agregó, acordar una agenda que permita ir avanzando en tiempo y forma.
Sobre el bloqueo de la zona arqueológica, el funcionario del INAH, reconoció que esto sí ha afectado la recuperación económica del sitio, sin embargo, persistió en que primero se deben enfocar en mantener la agenda de trabajo y el diálogo.
Edición: Estefanía Cardeña
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