Esta mañana, el colectivo MYL Causas convocó a una manifestación por la salud mental en Yucatán, misma que inició alrededor de las 10:30 en el pasaje de la revolución con aproximadamente 20 jóvenes que decidieron sumarse para exigir este derecho humano y “agitar conciencias” con respecto a las altas tasas de suicidio en el Estado.
Iniciaron con una actividad de reflexión en donde experimentaron un episodio de ansiedad en su primera etapa, la cual consistió en pensamientos reiterados, siguiendo las instrucciones que les iban dando; esto, para empatizar con las personas que viven con ella y procurar ser amables en el día a día.
El sicólogo Edgardo Flores, estuvo presente al finalizar dicho ejercicio, para visibilizar que el suicidio no es originado en una sola causa y que, además de las obligaciones de las autoridades para procurar la salud mental, también es necesario que la sociedad rompa estigmas.
“Estamos hablando de vidas, estamos hablando de experiencias, de dolor emocional profundo y, cuando comprendemos que es algo que experimenta alguien que está inmerso en un entorno social, es cuando comprendemos que todas, todos, todes, somos responsables de prevenir esta situación”.
Las personas, dijo, tienen que asumir la responsabilidad que les corresponde, pues en mucho la problemática del suicidio es consecuencia de la violencia sistemática presente en todos los ámbitos, “si queremos hablar de salud mental, si queremos hablar de prevenir las muertes por suicidio, tenemos que hablar de qué estoy haciendo yo”.
Destacó que continuar luchando para que las instituciones brinden espacios para el tema, es importante, pero también lo es el cuestionarse sobre qué actitudes propias podrían estar contribuyendo con la problemática.
“Vamos a trabajar como comunidad, como una unidad común que busca construir un entorno social libre de prejuicios, juicios, segregaciones y entonces ahí es donde vamos a hablar de verdadera salud mental”.
Comentarios como ‘exageras’, ‘no es para tanto’, ‘ya deja de pensarlo’ continúan con la problemática, pues subrayó que es necesario reconocer que cada sufrimiento es único y particular, todos igual de importantes, por lo que, aunque no puedan comprenderse a profundidad, brindar compañía y escucha puede transformar.
“Quien está pensando en morir por suicidio, realmente no quiere morir, lo que quiere es dejar de sentir ese dolor, ese sufrimiento, esa sensación de culpa, de impotencia, de incapacidad, de desesperanza”.
Las personas del entorno pueden hacerle saber que no logran comprender en su totalidad lo que le ocurre, sin embargo, hacerle saber que cuentan con su apoyo puede hacer la diferencia. “Necesitamos que cada persona asuma la responsabilidad que le toca: construir una sociedad libre de juicios, prejuicios, violencias”.
Una de las participantes en el encuentro, expresó su testimonio, pues ella vivió un intento de suicidio y reconoce que su familia y personas cercanas fueron un elemento fundamental para salir adelante y encontrar el bienestar, por lo que pidió conciencia para quienes están cerca de alguien que ha vivido esta situación, en especial para madres y padres, que les apoyen llevándoles a terapia cuando es posible económicamente y, cuando no, que procuren informarse por medio de internet.
Edición: Laura Espejo
Mujeres son fundamentales en el desarrollo de fármacos: Lena Ruiz
La Jornada
Juan José Pacho, impresionado con el Kukulcán; “luce monumental”
Antonio Bargas Cicero
“Será un año divertido”, señala; Matos le habló bien de la organización
Antonio Bargas Cicero